Una empresa de El Ejido ‘crea’ el primer camión dual de España

El Ejido será testigo del nacimiento del primer camión dual de nuestro país. Se denomina con este nombre a los vehículos que alternan el uso de combustible fósil (diésel normalmente) con gases licuados procedentes de butano y propano. Ello se hace posible gracias a la instalación de un sistema patentado en Alemania y cuya explotación  fue comprada por la empresa almeriense Calorhogar Hermanos Moncada para España. 

La adquisición de los derechos de explotación de dicha patente germana ocurrió hace ya tres años pero hasta ahora no se ha podido instalar este sistema ya que el vehículo en cuestión no habría pasado la ITV. Sin embargo, desde hace dos meses la patente está aprobada debido al trabajo realizado por esta empresa junto al INTA catalán.

Tres años

“Llevamos tres años trabajando para que nos permitan instalar este sistema en vehículos pesados”, explica Agustín Egea des la empresa Calorhogar que hoy mismo comenzará la instalación del primer sistema dual en un camión de otra compañía ejidense, Murgi Cargo. En total, invertirán dos jornadas para acoplar el sistema de gestión de gas a un camión de la flota de esta compañía ejidense para lo que un equipo de técnicos alemanes trabajará en Talleres Jemu e hijos durante hoy y mañana.

Este será el primero de su género pero no el único ya que esta empresa tiene previsto realizar cinco instalaciones más. Entre ellas, dos compañías de transportes sevillanas (Transportes Pantoja y Transportes La Puebla) así como en  Barcelona donde, de hecho, comenzaba también la adaptación esta misma semana.

Ventajas

Las ventajas de este sistema, explican desde la compañía encargada de su instalación, es una reducción importante del consumo de combustible (hasta un 20%) así como de las emisiones de CO2 (hasta el 70%). De este modo, se consiguen camiones más eficientes económica y medioambientalmente.

Vehículos pesados

Aunque, eso sí, es rentable sólo para vehículos pesados ya que el coste de la instalación que ronda los 5.800 euros no se amortizaría en un vehículo convencional. Ahora, el siguiente paso para que este sistema pueda implantarse y extenderse es implicar a las empresas petroleras para que instalen surtidores del gas necesario en las propias gasolineras.

“En Almería actualmente solo hay un surtidor”, explica Agustín Egea, “pero estamos en contacto con Galp, Repsol y Cepsa y parecen entusiasmados con la idea”. Es por ello que aventuran que, tras aprobarse esta  patente en nuestro país, comenzará un cambio en el transporte por carretera.