El consumo provincial de cemento cae a niveles de 1964

El parón del sector de la construcción, uno de los más recurrentes en la creación de empleo antes de la crisis, ha provocado caídas generalizadas de indicadores como el de viviendas terminadas, visados, hipotecas o licencias de obra.

Pero también se ha cebado con uno de los segmentos de negocio más sensible el de la venta de cemento. En Almería, donde opera  la multinacional Holcim en Carboneras y Gádor, se ha notado también esta pérdida de negocio con reajustes de plantillas. En Almería, según la patronal del sector Oficemen, la caída ha sido también brutal hasta situarse a niveles de consumo de 1964, hace casi 50 años, cuando empezó el boom del turismo y la segunda residencia.

Según estos datos, a nivel nacional, el consumo de cemento se desplomó un 33,8% en los diez primeros meses del año, hasta situarse en 11,74 millones de toneladas, con lo que se anota uno de los mayores descensos porcentuales desde el inicio de la crisis, según Oficemen.  La asociación alerta de que si esta caída del consumo no se frena "con ayuda de las administraciones" no se descartan nuevos ajustes de capacidad en las empresas de un sector que ya ha perdido una tercera parte (el 33%) de su empleo desde el inicio de la crisis.

La industria cementera española emplea actualmente  a 5.158 trabajadores, frente a los 7.730 con que contaba en 2007, ejercicio previo a la crisis. En la provincia también hay más de un centenar de trabajadores que viven directamente de esta actividad y muchos más de forma indirecta, sobre todo en el Levante y el Almanzora.
Con estos ajustes, el sector está adecuando sus volúmenes de producción a la actual demanda de cemento, afectada por el parón constructor de vivienda y obra civil. Según sus datos, el consumo registrado hasta octubre supone menos del 40% de la capacidad productiva del sector.

 Así, en los diez primeros meses del año se fabricaron en España 13,84 millones de toneladas de cemento, lo que arroja un descenso del 28,6%.

 Respecto al pasado mes de octubre, la producción se redujo un 33% en comparación con el mismo mes de 2011, después de que el consumo cayera un 24,7%, hasta 1,14 millones de toneladas.

  En cuanto a las exportaciones, Oficemen calcula que apenas superarán los seis millones de toneladas, un volumen que representa menos de la mitad que el contabilizado en los años ochenta.

La patronal estima que “de continuar las ventas internas en estos niveles y no incrementarse las exportaciones, se
acentúa el riesgo de viabilidad de la industria cementera, una de las de más arraigo que existen”.

Como en Marruecos

España consume ahora 235 toneladas de cemento por habitante al año y Almería no más de 200, lo que lleva a datos de 1964 y nos  igual a países como el vecino Marruecos.

España cuenta con 35 fábricas de cemento, dos de ellas en la provincia de Almería, con una capacidad de producción de 45 millones de toneladas anuales.

Uno de los asuntos que más afecta al sector es el incremento de las tarifas eléctricas en una industria con gran consumo.