Los ambulantes deciden el lunes su plan de rechazo al traslado del mercadillo

Los vendedores ambulantes decidirán el próximo lunes en asamblea cuales van a ser las medidas que van a tomar después de que el Ayuntamiento de Almería haya decidido llevarse de Plaza de Toros el mercadillo de los viernes.
Movilizaciones habrá seguro, aunque queda por decidir fechas y modos, pero tienen claro que lucharán ante el cambio aunque con un objetivo, consensuar el futuro de este mercadillo a pesar de que el concejal de Salud y Consumo, Carlos Sánchez, asegura que la decisión es en firme.

Explica el presidente de la Federación de Comercio Ambulante (FECOAM), Rogelio Gómez, que la decisión del cambio la comunicó Sánchez “hace dos semanas” y que en este tiempo “sólo ha dado tiempo a medir y plantear seriamente la zona del Alcampo” ubicado frente a la iglesia Jesús Redentor. Por lo que niega categóricamente que se lleve un año negociando el traslado.

En cuanto a las acusaciones del edil sobre la posible “coacción” a compañeros para que no ejercieran su derecho a voto, niegan la mayor y asegura que “no se ha amedrentado a ningún compañero” e incluso explica que “hubo dos compañeros que subieron a votar. La primera lo hizo por la mañana y al ver que no había votado nadie bajó con nosotros, y el segundo lo hizo por la tarde y tampoco votó”.

Explican desde la Federación que el principal problema que ven al cambio al barrio de Araceli es que “allí es muy difícil el acceso a las amas de casa y para el público del centro” con lo que creen que no irán más que los vecinos de la zona porque “tampoco hay aparcamientos para poder ir en coche”.