Un hombre es rescatado en un acantilado de 30 metros

Un hombre de 36 años de edad, con domicilio en Sevilla y que disfrutaba de unos días de vacaciones en la provincia, intentó escalar un acantilado de 30 metros próximo a la playa del Palmer, ubicada en el término municipal de Enix. El individuo no pudo continuar tras romperse el calzado.

Agentes de la Guardia Civil de Roquetas de Mar, junto con una componente legionaria, auxiliaron a esta persona que presentaba síntomas de cansancio. 

Minutos antes, los agentes de la Benemérita recibieron un comunicado de la Central Operativa de Servicios de la Comandancia de la Guardia Civil de Almería, alertando de la situación en la que se encontraba una persona que había intentado subir desde la playa hasta la carretera, por un acantilado de 30 metros.

El salvamento

Una vez en el lugar, los agentes de la Guardia Civil observaron a un hombre aferrado en mitad de un barranco, así como una mujer, identificada como componente de la Brigada de La Legión, de la Base Militar Álvarez de Sotomayor, de Viator, que había atado una cuerda a un punto fijo, para intentar auxiliarla. 
Así las cosas, y dado el alto grado de cansancio mostrado por la víctima, uno de los agentes de la Guardia Civil, no dudó en descolgarse por la cuerda hasta llegar a la altura de esta persona, a quien ayuda a mantenerse en el lugar.

Sin embargo, la cuerda colocada en ese momento era tan corta, que no permitió al agente auxiliar a esa persona con normalidad en ese momento, descendiendo un segundo componente hasta el lugar dada la complicada situación que se estaba generando, al estar la víctima cada vez más débil. Transcurrido unos instantes que se hicieron eternos, los dos agentes decidieron elevar a esta persona hasta lograr llegar a la cuerda, consiguiendo finalmente atar a la víctima para comenzar su ascenso desde arriba, por parte de componentes de la Guardia Civil, de la componente de La Legión y un ciudadano que ayudó en todo momento.

Una vez a salvo, esta persona fue atendida con los primeros auxilios, así como los compañeros de la Benemérita que habían descendido fueron subidos con ayuda.

Entonces, los agentes tuvieron conocimiento que la víctima, quiso subir desde la playa hasta la carretera, para llegar a su domicilio eventual, por lo que intentó ascender por el acantilado de unos 30 metros con chanclas.
Una vez había llegado a la mitad, se le rompió el calzado, quedando aferrado allí al no poder seguir subiendo.