Almería sigue teniendo un marcado acento saharaui

A las familias almerienses se les cae la baba al ver a los niños saharauis corretear por la sala. Ayer era todo alegría en el patio de la Diputación Provincial de Almería, lugar que sirvió de punto de encuentro entre las 72 familias y jóvenes del Sáhara.

Como cada verano, las familias almerienses han acogido con la mayor ilusión y mucho esfuerzo a 72 niños saharauis  durante los meses de julio y agosto dentro del proyecto Vacaciones en paz, a pesar de la difícil situación económica que se vive en muchos hogares. Pero es que cuando se habla de solidaridad, los almerienses lo ponen todo de su parte.

No obstante, la crisis se ha notado este año. Este verano hay menos niños en familias de acogida, pero aún así, merece ser reconocido el esfuerzo de las 72 familias de la provincia que han cuidado de los niños como si fueran sus propios hijos, dándoles un hogar y una alimentación saludable. “Los almerienses han superado con creces las expectativas que teníamos para este año”, aseguró la responsable sanitaria de la Asociación almeriense de Amigos del Sáhara, Julia Navarro. 

Gracia y Óscar, un matrimonio almeriense, son la viva imagen de la felicidad en estos momentos. Este verano tienen en su casa al pequeño Ali, de 10 años. Su ilusión es enorme, ya que para ellos es un privilegio disfrutar de la compañía de un niño, pues a día de hoy se encuentran en trámites de adopción. “Esta primera experiencia está siendo buenísima. Ya estamos pensando en viajar este invierno al Sáhara para volver a ver a Ali”, explican muy emocionados esta pareja

A la antusa Isabel le tocó la fibra sensible un artículo del periódico en el que se hacía un llamamiento a la solidaridad porque no había familias de acogida. “Cuando yo leí esa información, cogí el teléfono y me apunté”, explica con una sonrisa de oreja a oreja, junto a su niña Batul, de 12 años, su  hija y su nieta, Sonia.

Durante el acto de bienvenida en la Diputación de Almería, el presidente de la institución, Gabriel Amat, ha manifestado su compromiso con esta iniciativa y ha asegurado que va a seguir colaborando año tras año.

La Diputación de Almería ha concedido una subvención de 9.000 euros para este proyecto que permite a decenas de niños salir de los campamentos de refugiados, al menos, durante el verano.