Inquietud por el trazado de una obra que coincide con la tubería del Canal de Benínar

La alarma volvió a la barriada de Las Colinas hace unas semanas, cuando la calle Carmen Pinteño se llenó de marcas topográficas previas a la acometida de obras. Se trataba del trazado para las tuberías de  bombeo “con destino a un depósito de La Mojonera que se contempla dentro del proyecto estatal de la Desaladora de Balanegra”, explica el presidente de la asociación de vecinos, Juan Carlos Oyonarte.

El peligro llega cuando se comprueba que el trazado previsto coincide en parte con otra tubería que todavía causa quebraderos de cabeza en el barrio: la del Canal de Benínar. “Nos preocupó porque tocar la tubería, que está a escasos centímetros de los residenciales, podría suponer una catástrofe para toda Aguadulce”, advierte.

Suelo urbano Por ello, de la mano del diputado nacional Alberto Garzón, de Izquierda Unida -ya que fue Juan Pablo Yakubiuk, concejal en Roquetas de esta formación, quien se interesó por el problema-, la semana pasada la asociación presentó una serie de preguntas sobre el proyecto en el Congreso de los Diputados. En el escrito se pide aclaración sobre si el trazado transcurre en algún punto por suelo urbano o urbanizable, si se cuenta con los informes de seguridad suficientes y si se guarda la distancia legal entre estas tuberías y las del Canal o si existen intersecciones entre las dos infraestructuras.  

“Acudimos primero a Aquamed para trasladarles nuestra inquietud, y la verdad es que nos tranquilizaron al asegurar que legalmente se debe guardar una distancia de al menos metro y medio con la tubería del canal y que el dibujo topográfico realizado se replantearía en los puntos donde existiera peligro de coincidencia”, cuenta Oyonarte. Sin embargo, tras conocer que en algunos puntos de El Ejido, como Fuente Nueva, las dos infraestructuras han llegado a cruzarse, la asociación ha vuelto a preocuparse por el proyecto. 

Desconocimiento Más aún, cuando se sabe que en algunos puntos de la comarca de Poniente se desconoce a ciencia cierta el recorrido exacto que realiza la tubería del Canal de Benínar. El tramo que discurre por la calle Carmen Pinteño es perfectamente apreciable, ya que la construcción de la Urbanización Los Altos de Aguadulce se realizó a menos de metro y medio de la infraestructura, con el peligro que ello conlleva. Fueron sus residentes quienes, al intentar ajardinar el espacio de entrada al edificio, se ‘toparon’ con la gruesa y peligrosa tubería. 

Los antecedentes no son por ello tranquilizadores para Las Colinas. Si ya entonces se permitió edificar sin tener en cuenta la tubería, las obras actuales despiertan la inquietud del barrio. Pero no sólo por ello, sino que en otra zona, la de salida de la misma calle Carmen Pinteño, la necesidad de realizar un nuevo desmonte aumenta la preocupación de los vecinos. “No sabemos si la acometida de obras en ese desnivel no va a suponer inseguridad para el terreno en el que se levanta Los Altos de Aguadulce”, incide el presidente vecinal.

La asociación tiene previsto reunirse con el Ayuntamiento para trasladarle su intranquilidad, pero también con el delegado de Medio Ambiente de la Junta, con la intención de que la administración autonómica vele por que la obra de Aquamed no intefiera en la del Canal de Benínar que depende de ellos.

La asociación elaborará un informe

 Tras conocer que en algunos puntos de El Ejido, el trazado de la tubería de bombeo había coincidido con la tubería del Canal de Benínar, la Asociación de Vecinos ha decidido elaborar un informe de “Advertencias sobre riesgos y Seguridad” que será presentado en las distintas administraciones para solicitar que las obras no pongan en riesgo la seguridad de los vecinos de Las Colinas y de toda Aguadulce. Los representantes vecinales tienen previsto reunirse la semana próxima con el Ayuntamiento de Roquetas y llegar también a la Delegación de Medio Ambiente de Almería, responsable del Canal de Benínar, para que ‘vigile’ las obras de Aquamed.

El colectivo también anunció hace unas semanas la creación de una comisión técnica con el fin de estudiar el peligro real que supone que la tubería del canal discurra por terreno urbano y buscar posibles soluciones.