Las llamadas tabletas empiezan ya a sustituir a los libros de texto en las aulas, y en los colegios Attendis (Altaduna y Saladares) han cogido carrerilla. Desde este curso, los alumnos de 5º y 6º de Primaria trabajan a diario con Ipads “y los resultados son sorprendentes”, afirma el subdirector de Saladares, José Luis Guardiola. El equipo docente ha dedicado “muchas horas” para adaptar la enseñanza al proyecto pero son conscientes de que hay otro factor fundamental para poder exprimir todas las posibilidades de la tecnología: los padres.
Por ello, el pasado jueves comenzó en la Biblioteca de Roquetas un ciclo de conferencias destinado a ellos con el fin de que sean capaces de acompañar a sus hijos en el aprendizaje .
Perder el miedo
El primer objetivo de las sesiones es que los padres pierdan el miedo. “Hay que asumir que los niños son nativos digitales, que podremos poner los medios para familiarizarnos pero no estaremos a su mismo nivel”, subraya. Por ello, mantiene que hay que “ahorrarse el estrés” de querer controlar algo que no se puede. “Al contrario, los educadores debemos dejar la pelota en su tejado, que recaiga en ellos la responsabilidad y se sientan responsables”.
Tampoco se trata de conceder “una libertad total”, dice. Los expertos recomiendan que se establezcan unas medidas mínimas de prudencia “consensuadas y habladas con los hijos”. Una de las claves es hacerles comprender que las tabletas son herramientas de trabajo, así como las cuentas de email, “y que lo sean verdaderamente”.
Según la propia experiencia del colegio en estos dos meses, “el ambiente de trabajo en las aulas es impresionante”. Incluso han comprobado casos en los que el rendimiento del alumno ha mejorado exponencialemente. “Hemos visto el caso de estudiantes que antes desconectaban frecuentemente, y ahora, con las tablets, no perdían la concentración”, argumenta Guardiola; hasta tal punto que comprobaron que realmente estaban trabajando y así era. Y es que los docentes controlan las descargas que los alumnos realizan en sus dispositivos inteligentes.
Atención personal
“Para ellos es tan natural, acostumbrados a los mensajes audiovisuales, que los resultados están siendo buenísimos”, manifiesta el subdirector. La tecnología permite una atención más personal, “que cada alumno vaya a su ritmo; al más avanzado se le pueden dar más recursos mientras los otros no se quedan atrás”. La forma de preparar una clase también ha cambiado. “El acceso a la información es tan inmediato que en los casos de asignaturas como ciencias o historia ya no es el profesor quien da la información, sino que guía al alumno”.
En otras asignaturas, más técnicas, el cambio no es tan grande. “El Ipad se encuentra en un atril en la mesa del alumno, como un libro de texto pero ellos continúan trabajando mucho en las libretas, claro”, aclara el profesor. De hecho, insiste en que “no se pierde el método tradicional de lectoescritura, al que estamos acostumbrados”.
Además de las tabletas, los estudiantes cuentan con una cuenta de correo electrónico, “también para compartir exclusivamente cuestiones de trabajo, y lo cumplen muy bien”. Sobre las redes sociales, que protagonizarán otra de las sesiones del ciclo, el docente también aboga por perderles el miedo, “tienen también muchas ventajas, el peligro es que pierdan el tiempo con ellas, pero se les puede dar un plazo de tiempo”. La próxima conferencia será el día 27 a las 19.30 horas.
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