La “vergüenza” de la Escuela del Mármol

El Consorcio de la Escuela del Mármol de Andalucía ubicada en Fines sigue siendo objeto de acusaciones políticas tras la acumulación de 14 nóminas sin cobrar por parte de los trabajadores y la consecuente inactividad a falta de su integración en el ente público de educación andaluz.

La parlamentaria andaluza del Partido Popular de Almería, Aránzazu Martín, ha denunciado en el Parlamento Andaluz, que el Gobierno de la Junta “no da una solución a los problemas generados en torno a la Escuela del Mármol de Fines”, cuya consecuencia principal es que a día de hoy los trabajadores siguen sin cobrar sus nóminas después de 14 meses, y los ciclos formativos siguen sin aprobarse. El tono ha ido a más durante la intervención hasta señalar que lo acontecido con el Consorcio es “una vergüenza” al espetar que “ni se paguen atrasos ni se abonen las indemnizaciones correspondientes a los juicios que están ganando los trabajadores a la Junta de Andalucía.

A todo esto, según la parlamentaria popular, hay que unir que “de los 24 trabajadores que impartían docencia en el consorcio, tan solo quedan 15, puesto que estas personas han tenido que abandonar para buscarse la vida,  y no han podido seguir aguantando ante la inseguridad creada por la Junta como consecuencia de los impagos y la falta de una solución definitiva”. Según Martín “la solución que plantea la Junta es integrarlos en el Servicio Andaluz de Empleo a través de un Decreto Ley que deberá estar aprobado en septiembre, cuestión que el PP no ve del todo clara puesto que no hay que olvidar que el SAE es uno de los servicios de la Junta del que cuelgan grandes problemas e impagos como son los promotores de empleo, los agentes de empleo, o los Alpes, todos ellos con despidos improcedentes, nulos, e impagos de juicios ganados”.

Respuesta de la Junta
Sin embargo, desde la Junta consideran que la integración en el ente público andaluz sí supone una solución para los consorcios en la misma situación que la Escuela del Mármol de Andalucía. El delegado provincial de Economía, Innovación, Ciencia y Empleo de la Junta, Miguel Ángel Tortosa, ha señalado este viernes que, según las previsiones del Gobierno, la Escuela del Mármol podría iniciar sus cursos formativos “a finales de año o a principios del próximo”.

Según ha explicado Tortosa, está previsto que durante el mes de septiembre se finalice la auditoria y el informe económico relativo al centro que permitirá liquidar el consorcio y permitir que el centro se integre en la estructura de la Consejería de Economía, momento en el que se diseñará una hoja de ruta que orientará la puesta en marcha del centro por lo que, según la Junta, los cursos arrancarán a finales del presente año 2015. En relación a este asunto, el titular provincial de Economía ha asegurado que una vez que se regularice la situación antes de que finalice el mes, los empleados verán solucionada su situación y podrán cobrar los salarios atrasados. “Es la situación más dolorosa que se ha dado con la liquidación”, ha lamentado Tortosa.

Sin despidos
Según el delegado, las directrices con la que se trabaja para la integración de la Escuela del Mármol no contempla despidos entre la plantilla existente, si bien no ha podido determinar si se dará una amortización de plazas tras la renuncia de varios empleados.

“Dependemos también de lo que marque el centro”, ha apuntado el delegado, quien no descarta que se cubran plazas o se “recoloque” a parte de la plantilla en función de las necesidades de la escuela con el objetivo de que mantener “la calidad” de formación de años anteriores.

Consorcio: De 24  a 15 empleados
Los reiterados impagos a los trabajadores de la Escuela del Mármol de Andalucía ubicada en Fines ha provocado que, durante los últimos meses, la plantilla se haya visto mermada y pasando de contar con 24 empleados a 15, ya que algunos de ellos han decidido poner fin a su relación contractual mientras que otros han solicitado excendencias. Trabajadores del centro reconocían recientemente a LA VOZ que en algunos casos han tenido que pedir dinero a sus familias para mantenerse o buscar otras ocupaciones.