502 aniversario del terremoto que arrasó la antigua Bayra

El día 9 de noviembre de 1518, la ciudad medieval enclavada en el ahora denominado “Cerro del Espíritu Santo” fue el epicentro de un gran terremoto, que acabó con la vida de 150 vecinos de los aproximadamente 600 que en aquella época habitaban la ciudad.

Debido a la magnitud del seísmo, la imponente alcazaba que coronaba el cerro se derrumbó junto con las casas y murallas de la antigua ciudad medieval lo que supuso un drama y un reto para aquellos antepasados que tenían la complicada tarea de levantar la “nueva” Vera, tal y como la conocemos hoy en día.

502 aniversario

Este año no será posible subir al Espíritu Santo, ni realizar el recorrido teatralizado por las calles de Vera en compañía de personajes de nuestra historia. El año pasado el presidente de Diputación estuvo presente en los actos que se realizaron en el municipio de Vera.

Este 502 aniversario del terremoto que arrasó la antigua ciudad de Bayra se conmemorará de diferente manera a lo habitual, por su parte, el grupo vecinal gestor del perfil de Facebook “no eres de Vera si…”  están subiendo vídeos y fotos a las redes sociales para recordar los momentos de otros años y otras ediciones y seguir haciendo partícipes a los vecinos que tanto se involucran en los actos cada año. Este grupo junto con la Concejalía de Cultura del Ayuntamiento son los que habitualmente organizan los  actos conmemorativos.

Actos

Cómo homenaje a las víctimas de aquel fatal suceso, el 9 de noviembre se ha convertido en la fecha donde los veratenses conmemoran este hecho histórico mediante una serie de actividades. En condiciones normales, para conmemorar este hecho histórico al que le sucedió la construcción de la nueva Vera, se organizaban una serie de actividades entre las que destaca la ruta teatralizada.

Seguidamente se procedería a leer e interpretar el “Romance del ciego”, narración muy del gusto de la época, donde se cuenta lo acontecido aquella noche de triste memoria para Vera.

Sin duda el acto más emotivo de la conmemoración se desarrollaría un día como hoy, con una subida colectiva al cerro del Espíritu Santo, donde 150 antorchas, una por cada víctima, iluminarían el camino de los vecinos hasta la explanada del aljibe - museo Centro de Interpretación de la Ciudad Medieval de Bayra - donde se procedió a la lectura de un manifiesto de Don Íñigo de Guevara, alcalde mayor de Vera en el momento del terremoto junto al apagado de luz de la imagen del Sagrado Corazón que preside el cerro con un minuto de silencio en memoria de las víctimas. Todo ello a las 23:00 horas en punto, momento en el que según los relatos de la época tuvo lugar el terremoto. El año pasado este emotivo momento fue acompañado por la interpretación de “La muerte no es el final” por el tenor Enrique Parra. 

Los actos concluirían con una ofrenda floral bajo la lápida en recuerdo a las víctimas ubicada en la fachada del Ayuntamiento. Un 502 aniversario vía online, con vídeos y fotos que de alguna forma u otra llegará emotivamente al corazón de los veratenses recordando así este día de 1518, una nueva Vera resurgiría entonces hasta nuestros días con el esfuerzo de todos los vecinos que cada año reforzados por su indiscutible resiliencia llevan al municipio por bandera destacando sobre todo el buen hacer de sus antepasados.