Es uno de los futbolistas con más talento de la UD Almería y lo quiere demostrar. Ha llegado el parón del Mundial y Largie Ramazani reconoce que todavía puede y debe darle mucho más al equipo. Empezó como titular pero ha perdido continuidad en la alineación de Rubi. Estas semanas le vendrán bien para recapacitar, y es que a su nivel top siempre tendrá un hueco en el once.
El canal oficial de LaLiga ha querido acercarse al extremo belga. Con solo 21 años el éxito le ha llegado con un ascenso a Primera y el estreno goleador ante todo un Real Madrid y enfrentándose a su ídolo: Hazard. Procesar tanta información en poco tiempo le puede pasar factura pero él se considera una persona madura, con los pies en la tierra.
El cambio
En la entrevista Ramazani explica el gran cambio que supone competir en la mejor competición nacional: "Todo el mundo ve la Liga y para mí estar en Primera es muy importante, especialmente siendo tan joven. Segunda es más compacta, los jugadores siempre están encima, pero ahora ves más espacios, tienes más tiempo el balón y la toma de decisión es más rápida".
La magia
Conoce sus virtudes y sus defectos y cuando se encuentra en su nivel máximo de fútbol puede darle cosas muy diferentes al Almería. Su meteórico inicio junto a Umar Sadiq tiene que volver después de la pausa mundialista porque es consciente de que se espera muchísimo de él: "Soy ese tipo de futbolista que con espacio puedo ser peligroso aportando velocidad, un extra de magia, electricidad al juego, y obviamente también goles para el Almería. Aún soy joven, pero a la vez inteligente en el campo".
Rubi, el líder
Y no se esconde a la hora de hablar de Rubi. No le tembló el pulso al catalán para sentarlo en el banquillo pero eso no quita que Ramazani respete a su líder, a la persona que más le ha aportado en los años que lleva en el fútbol y en concreto en el Mediterráneo: "Es el entrenador que más me ha ayudado en mi carrera deportiva. He mejorado mucho con él porque me da confianza pese a mi edad y lo veo como un técnico que se centra mucho en ayudar a los jóvenes y que es justo. Siempre quiere lo mejor para ti y es clave en un míster".
Objetivos de futuro
Ramazani es una persona que piensa en grande y aún con una trayectoria por recorrer en el deporte de elite espera que algún día pueda defender a Bélgica en un Mundial, así como meterse entre los aspirantes a un Balón de Oro: "El objetivo es probarme a mí mismo, mejorar, dar asistencias, marcar goles, estar ahí, que se me vea. Uno de mis sueños es jugar un Mundial y ganar el Balón de Oro. Todas esas cosas llegarán con el tiempo. Ahora solo pienso en crecer como futbolista, como persona".
Valiente
Por último, indica que el Almería está cinco puntos por encima del descenso por sus méritos, se han ganado un reconocimiento de la categoría pese a un mes de septiembre muy negativo y lo mejor todavía está por llegar en cuanto se reanude el fútbol: "Somos jóvenes y a la vez fuertes. Hemos venido a demostrar que el Almería no solo es un recién llegado, sino que quiere sorprender a más de uno. En casa no sentimos cómodos con la afición detrás".
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