EL ANÁLISIS DEL DÍA: La cruda realidad del Almería tiene fecha. No es la de caducidad, hablamos de un día que empieza a ser historia para el club y sus fieles aficionados porque no se ha vuelto a repetir nada igual, ni se asemeja a lo vivido aquella jornada 35 de la temporada 2022-2023. Lo que pasó es algo que no ha vuelto a suceder y justifica lo que ahora ocurre en la provincia de Almería. Porque aquel 20 de mayo ganó el Almería su último partido en Primera y ahí se paró la cuenta. Con tres goles de Lázaro se daba un paso decisivo para la permanencia en la categoría y la afición se lo pasaba en grande con el entonces Almería de Rubi que con sus carencias iba mejor que el actual.
Ganar un partido en Primera División cuesta mucho pero han pasado 135 días de aquello y el equipo vive en el pozo de la tabla con solo un punto más que el Elche a estas alturas del campeonato. La octava jornada de aquella Liga tenía en descenso a Sevilla, Cádiz y Elche.
El club ilicitano que celebraba su centenario y se había reforzado con buenos jugadores no había ganado un partido y se hundía sin remisión en la tabla. Algo parecido a lo que se vive hoy en Almería con un equipo colista y una afición desencantada. O cambian las cosas o ya sabemos el camino.
Inolvidable
Aquella victoria frente a un Mallorca salvado fue relajante para los aficionados del Almería que asistían sorprendidos a la explosión de Lázaro en la jornada 35 después de una Liga donde no rascaba bola en los partidos. Ese día la grada disfrutó de lo lindo.
Se daba un paso decisivo para salvar la categoría aquel 20 de mayo y un fichaje top por fin justificaba el dinero invertido. Parecía su explosión y solo era una burbuja. El brasileño sigue sin ser protagonista en las alineaciones.
Irreconocible
Esta iba a ser la temporada de la tranquilidad y se habló de subir el caché del entrenador para luego contratar a Vicente Moreno. Se vendió un año feliz en Primera y la afición anda de los nervios con un equipo que no transmite nada. Esto va de ganar, no de sensaciones.
Con más de 50 millones de gasto debería de dar para ganar un partido pero ni con Moreno ni con Lasarte se ha logrado ni marcando tres goles. Es imposible cuando llevas 21 goles en contra.
Alerta
Han pasado 135 días de la última victoria y el club vive en estado de alerta roja con el fantasma del descenso llamando a su puerta y sin soluciones a corto plazo. Si ya nos empezamos a acordar de Rubi, mal asunto.
Cuesta ganar un partido en Primera División pero esto nadie lo esperaba y salvo que Turki haga algo especial desde Palacio su club se empieza a parecer peligrosamente al Elche para desencanto de una afición que esperaba una Liga tranquila.
¿Qué pasó aquel 20 de mayo?
¿Llegaremos a tiempo para darle la vuelta a esto?
Esperemos.
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