Consejos para diseñar la habitación perfecta

Pese a que no lo parezca, un diseño de habitación acertado es importantísimo para nuestra salud. De este modo, la creación de un cuarto debe ir más allá de pensar dónde colocar nuestros muebles favoritos, como el tocador maquillaje, por ejemplo. La distribución, la luz, así como el estilo de los materiales son factores que hay que tener muy en cuenta a la hora de diseñar nuestro dormitorios. Por eso, si no sabes cómo organizar el tuyo o te sientes un poco perdido, aquí te dejamos unos consejos que te vendran muy bien.

1. Piensa en el estilo que buscas

Lo primero que se debe hacer a la hora de crear el dormitorio perfecto es pensar en el estilo. Dependiendo del que estemos buscando, nos resultará más fácil decidirnos después por los materiales y los muebles. Por esta razón, aunque tengas la tentación de reutilizar mobiliario antiguo o que has heredado, es conveniente decantarse por otro de tu elección. Pero, si de verdad quieres utilizar dichos muebles, lo fundamental será buscar otros similares, así como adaptar el estilo a ellos para que no desentonen.

2. Materiales más populares

En cuanto a los materiales utilizados en los dormitorios, sin duda, el más popular es la madera, ya que siempre aporta sensación de calidez. No obstante, si se prefieren materiales más resistentes sin renunciar a este efecto, se puede optar por la cerámica o materiales ecológicos. Estos forman parte de las últimas tendencias y entre ellos destacan algunos tejidos como la tela de saco o arpillera.

3. Distribución de la habitación

Si tienes la suerte de que tu habitación sea amplia, puedes dividirla en varias zonas. En cambio, si es pequeña, puedes colocar la cama en una pared trasera y centrarla. Después, los muebles pueden organizarse en el muro adyacente, siempre respetando el espacio.
Asimismo, una manera de ahorrar espacio es que la cama cuente con una base de zócalo para poder tener más lugar de almacenamiento, así como un cabecero que pueda servir para colocar libros, etcétera. De hecho, la elección del cabecero es muy personal, pues hay quienes apuestan por cabeceros más grandes y con iluminación y quienes prescinden de ellos, para dar sensación de mayor amplitud.

4. Todo dormitorio necesita una buena iluminación

La denominada iluminación en capas es fundamental en un dormitorio. Este tipo de iluminación consiste en varias fuentes de luz que puedes activar y desactivar, dependiendo de tus necesidades. 

5. Prescinde de la tecnología

Aunque esto no se cumpla casi nunca, la mejor decisión que se puede tomar con respecto a un dormitorio es prescindir de la tecnología en él. La habitación debe constituir una zona de descanso, y se sabe que los aparatos tecnológicos son enemigos declarados para este objetivo. No solo porque convierten la estancia en un lugar para otras actividades, sino porque el calor que generan, así como el ruido, impiden descansar bien. Por tanto, como último consejo, es preferible que la tecnología la tengas en una oficina o en el salón, antes de incluirla en tu cuarto.