El bocado almeriense a los Max. ‘Danzad malditos’, con Rubén Frías, mejor espectáculo revelación

El almeriense Rubén Frías ha dado un buen bocado a la manzana con antifaz diseñada por el poeta y artista plástico Joan Brossa como trofeo de los Premios Max de las Artes Escénicas. El actor forma parte del reparto de ‘Danzad malditos’, considerado el mejor espectáculo revelación en la décimo novena edición de estos prestigiosos galardones que se celebró el lunes por la noche en el Teatro Circo Price de Madrid.

“Fue todo muy rápido, la gala me pareció estupenda, y como nuestra categoría era de las primeras en entregarse, la pudimos disfrutar a tope. Este premio es la recompensa a un año y medio de trabajo, esfuerzo y sacrificio”, confiesa Frías en declaraciones a LA VOZ.

A ojos del intérprete, uno de los momentos culmen de la velada fue ese en el que se desveló que esta producción de Malditos se había alzado con el reconocimiento al que también optaban ‘Nosotros no nos mataremos con pistolas’ de Wichita Co y ‘Penev’ de La teta calva.

“Cuando soltaron nuestro nombre, el público rompió a aplaudir y casi se cae el teatro abajo, hasta los que no se lo habían llevado lo celebraron con nosotros. Recuerdo ver a Aitana Sánchez Gijón emocionada y el subidón que dio de pensar que estaba así por nosotros”, expresa.

‘Danzad malditos’, que en este momento se encuentra de gira por España, pudo verse del 25 de noviembre al 13 de diciembre de 2015 en la Sala Naves del Español, en Matadero, Madrid, y también se representó en el Festival de Artes Escénicas Frinje, que tiene lugar de forma anual en la capital de España.

“Agotamos muchas funciones y cosechamos una gran acogida de crítica y público. La verdad es que hemos hecho mucho ruido, de ahí que la gente se alegrase tanto a pesar de que las otras dos candidatas eran muy buenas y estaba muy difícil”, apunta el actor almeriense. 

Maratones de danza
Bajo la dirección de Alberto Velasco, esta versión libre de la película ‘Danzad, danzad, malditos’ que dirigió Sydney Pollack en 1969 y que firma Félix Estaire constituye un homenaje a los maratones de danza de los años 20  y 30 que eran puro espectá́culo, el reflejo directo del esfuerzo, la entrega, el sudor y las lá́grimas, donde brillan las miserias de unos pocos aplaudidas por otros muchos distanciados por las necesidades econó́micas y el ansiado sueñ̃o americano.

Según su director, Alberto Velasco, con esta propuesta han querido reflejar “ la lucha real de los competidores en estos maratones, por lo que los inté́rpretes de la pieza se aprenden todo su entramado, las escenas y coreografí́as”. “Las parejas lucharán en di­recto por continuar en la obra. Se irá́n eliminando sucesivamente las que no su­­­­­­­­­­­­­­­pe­­­­­­­­r­­en­ las pruebas y sólo seguirá́n adelante los ganadores”, ha señalado.

En este sentido, Rubén Frías explica que cada función es diferente. “Todos nos sabemos toda la obra porque nunca sabemos qué texto nos va a tocar decir. A ver si con esto del Max conseguimos llevarla a Almería”, indica. 

Cal y arena
La gala de los Premios Max tuvo una de cal y otra de arena para Almería. Si una parte de la codiciada manzana fue a parar a Rubén Frías, Paco Bezerra, nominado a mejor autor teatral por ‘El señor Ye ama a los dragones’, no se alzó con el galardón que recayó en Alberto Conejero por ‘La piedra oscura’.

El espectáculo de danza ‘Pinoxxio’ fue el gran triunfador de esta XIX edición, en la que destacaron las críticas a la política del Gobierno en materia cultural, el trato de los refugiados o el arresto de los titiriteros de Títeres desde abajo (compañía de la que forma parte el almeriense Alfonso Lázaro).

En el teatro alternativo de Madrid
Rubén Frías (Almería, 1983) es licenciado en Arte Dramático y trabaja desde años en el teatro alternativo madrileño.

Ha interpretado ‘El malentendido’ de Camus y ‘Danzad malditos’, la propuesta premiada en los Max. También ha trabajado en ‘La cena del rey Baltasar’ de Calderón, con la que estuvo en los festivales de Olmedo y Almagro. En cine, participó en el largometraje ‘Temporal’ con Adrián Lastra y Melani Olivares. Y en televisión, en la serie ‘Gran Hotel’. 

Es uno de los fundadores de La Oficina Producciones Culturales.