Ha comenzado con una exposición en el Museo de Almería, pero sin duda el Pymiento Project no se detendrá ahí. Este es el comienzo de un camino, dicen todos sus miembros, en el que se la pasarán de lujo creando, experimentando y “haciendo cosas”.
El Pymiento es un proyecto atípico y libre, como muchos de los movimientos sociales de estos tiempos. Sus participantes son artistas, ingenieros, programadores, diseñadores, que básicamente se han planteado un reto: ¿podemos hacer compatibles las prácticas creativas del arte, el desarrollo de software o la ingeniería, en un único proyecto? ¿Qué efectos tendría la participación de diferentes perfiles y culturas profesionales en un proyecto deliberadamente multidisciplinar?
La exposición con que se han presentado se llama ‘¡Mamá dejó la fregona y se fue al museo a programar!’, y busca, pues, moverse en esa zona en que se unen la tecnología, el arte y la ciencia. “Vivimos en la era de la complejidad, de los efectos en cadena”, dicen en su manifiesto. “La tecnología nos proporciona cada día nuevas herramientas para seguir respondiendo preguntas. Hoy más que nunca, el arte puede ayudarnos a plantearlas desde una perspectiva humana”.
La matriz
El Pymiento Project hunde sus raíces en Hacklab Almería, un potente colectivo de experimentación tecnológica, social y creativa que lleva un tiempo agitando la vida cultural almeriense.
A muchos de sus miembros les venía rondando desde hacía meses la idea de abordar proyectos interdisciplinares. Y en mayo, cuando se supo que Almería sería la sede de la PyConES, el congreso nacional de Python, se produjo el ‘click’ que puso en marcha la materialización del sueño.
Los fundadores fueron Adolfo Rosillo Herrera, José María Martínez García y Cristóbal Contreras Rubio. Adolfo tuvo la idea de abordar el evento con una exposición de cuadros de arte generativo hechos con Python. Sería el pistoletazo de salida, el ponerse una fecha para forzarse a concretar proyectos.
En poco tiempo se formó un grupo. “Hoy somos unos 15” , dice Cristóbal, “pero esto es libre, puede venir quien piense que tiene algo que aportar”. Usan herramientas online para comunicarse, y controlar las tareas; y para las reuniones semanales tuvieron el apoyo de Workspace Coworking, que compaginaron con la ChancaStyleParties, “la terraza de nuestro compañero Gonzalo Moyano”, explica Cristóbal.
Posteriormente, el Museo de Almería se implicó en el proyecto, permitiéndoles el uso de sus instalaciones para las reuniones y para la exposición, que estará abierta hasta el 6 de noviembre. La inauguración, el sábado 8 de octubre, reunió a unas 200 personas. Ahora vendrán talleres y actividades. Lo tienen claro: “Esto acaba de empezar”.
Consulte el artículo online actualizado en nuestra página web:
https://www.lavozdealmeria.com/noticia/5/vivir/115566/pymiento-project-arte-y-tecnologia-en-el-museo