"Ayman, Historia de un Refugiado" pone el cartel de no hay billetes en el Padilla

“Lo mejor hubiese sido que ninguno de nosotros estuviera aquí esta noche, que nunca se hubiera hecho este musical”. Así presentaba Álex García la obra ‘Ayman, Historia de un Refugiado’, sobre las tablas del Auditorio Municipal Maestro Padilla. Una representación sobre la tragedia humanitaria en Siria, y en la que su equipo creativo y los más de cien voluntarios que han trabajado, ha contado con el apoyo del Área de Cultura, Educación y Tradiciones del Ayuntamiento de Almería, del área de Servicios Sociales de la Diputación Provincial, además de entidades educativas como la Fundación Almería Social y Laboral y la Universidad de Almería, así como del Colegio Oficial de Trabajo Social. Todos ellos consiguieron un casi lleno absoluto en una obra en la que lo recaudado en las entradas irá destinado a la ONG Proactiva Open Arms, que actúa en las aguas del mar Mediterráneo.

Ayman no es el protagonista del musical. Ayman tan solo recrea la trágica historia personal de un sirio más entre decenas de miles que se han visto obligados a salir de su país a causa de la guerra. La obra comienza con la narración del Ahmad de hoy (Jesús Herrera), que se remontará al inicio del fin de su normalidad, tras años atrás, cuando un bombardeo y tiroteo acaban con la vida de Fátima (Yolanda Ríos), la mujer de Ayman (Pepe Luis Arganda) y madre de Ahmed (Iskander Ainz) y Mariam (Maite da Costa).

A partir de ese momento comenzará un viaje que llevará a Ayman y su familia a pasar por un campo de refugiados, a la separación de sus hijos por traficantes de personas, a la búsqueda incesante hasta que, finalmente, la historia tendrá el final deseado con el reencuentro del padre con sus hijos en Alemania.

Para dar vida a esta historia, el musical aunó teatro, danza acrobática, proyecciones (Juanfran Martínez), música original (José Azurmendi) y en directo, interpretada por una orquesta de con percusión (Alejandro Mañas), violín (Ana Querol), violonchelo (Helena Fernández), flauta travesera y trombón (Jesús Valverde), trompeta (Juan Ruiz Galiano), piano (José Azurmendi), además de los solistas vocales Belén Ruiz, Alena Soucek y José Azurmendi, acompañados de un coro de casi medio centenar de voces. Una puesta en escena de gran nivel que sirvió para sumergir más a los espectadores para una historia de tantas. Al menos, la ficción permitió elegir un final feliz.