Distopía y violencia en el desierto

Un taxista taciturno hasta el extremo de no pronunciar palabra, un ejecutivo sin muchos escrúpulos, una chica con ganas de pasarlo bien y a las puertas de una vorágine de violencia, los extraños empleados de una gasolinera, un solitario cazador y un depravado. Y, de escenario de lujo, el Desierto de Tabernas.

Esos son los ingredientes con los que abrió ayer el Certamen ‘Ópera Prima’ el largometraje gallego ‘Dhogs’, de Andrés Goteira.

De esta forma, el Festival Internacional de Cine de Almería (Fical) continúa en esta edición su idílio con Galicia: si en la gala inaugural Luis Tosar recogía el premio ‘Almería, tierra de cine’, el pistoletazo de salida de las proyecciones tuvo lugar en gallego, subtitulado al castellano.

Sueño cumplido

Durante la rueda de prensa dada en la mañana de ayer por Goteira junto a los actores María Costas y Antonio Durán ‘Morris’, el propio director del film reconocía que fue “un sueño cumplido venir y rodar” en Almería.

El director novel rememoró la principal anécdota de los días de rodaje en el Desierto de Tabernas: a pesar de las escasas precipitaciones que suelen hacer acto de presencia en nuestra provincia, los dos primeros días del rodaje estuvieron protagonizados por la lluvia.

“Al segundo día nos queríamos ir porque no paraba de llover. Al final lo logramos, pero recuerdo aquella tensión, no poder dormir pensando en que tendríamos que irnos sin rodar”, recordaba Goteira.

No obstante, el tiempo respetó el resto del plan de rodaje y, finalmente, el resultado fue el esperado. “Nunca había rodado con un equipo y venir aquí, donde se han rodado tantas películas...Justo una escena la grabamos en uno de los sitios en los que grabó Clint Eastwood… Fue estupendo”, desmenuzó ayer Goteira, dejando claro que “todo fue bien”.

Crudeza rural

‘Sin Perdón’, película dirigida por Clint Eastwood, las creaciones de Haneke, películas de los hermanos Coen... Estos son los principales referentes que han llevado a Goteira a crear ‘Dhogs’, una película dividida en tres capítulos que componen una esperial creciente de violencia.

De hecho, Goteira considera que es la parte rodada en el Desierto de Tabernas aquella que encierra escenas más crudas.

Las escenas rodadas en Almería incluyen todo lo transcurrido en una gasolinera (que, a decir verdad, son imágenes rodadas en dos gasolineras distintas de la provincia) y en ella también hay algo de anecdótico: tal y como explicaba María Costas, es la misma gasolinera en la que fueron grabadas algunas escenas de la serie de Netflix ‘Black Mirror’ (aunque Costas aclaró que ‘Dhogs’ se rodó con anterioridad).

Además de las referencias al western que encierra ‘Dhogs’, la ópera prima de Goteira confluye en los últimos minutos con ‘Black Mirror’, precisamente.

Evitando destripar cualquier detalle de la trama de esta película que anoche pudo verse en Almería y que está disponible en la plataforma digital Filmin, basta decir que ‘Dhogs’ plantea una singular y futurista forma de consumo audiovisual: una en la que es el propio espectador el que elige qué sucede con los personajes.

‘Carmen y Lola’, ‘Con el viento’, ‘Matar a Dios’, ‘Sin fin’ y ‘Viaje al cuarto de una madre’ completan un certamen de alto nivel cuyo ganador se desvelará en el final de este Festival Internacional de Cine de Almería que acaba de empezar.

Hoy, a las 21 horas en el Teatro Cervantes, le toca a ‘Carmen y Lola’, ópera prima de Arantxa Echevarría.