La joven madurez de Rocío Segura está plasmada en ‘Sueño del alma’

Pese a su juventud, Rocío Segura hace gala de una madurez flamenca incontestable. Así lo ha puesto de manifiesto en su último disco, que presentó con gran éxito la noche del pasado sábado en el auditorio Maestro Padilla.  Todo ello, subrayado por el gesto solidario de la artista, que destinó la recaudación a la Asociación Española de la Lucha contra el Cáncer.
 La cantaora almeriense se sentía muy orgullosa de mostrar en su tierra y ante su afición un trabajo en el que ha puesto lo mejor de su talento, como quedó patente a lo largo de la velada.
Rocío saludó por tangos a su audiencia, que se rindió a su arrolladora fuerza desde las primeras estrofas. Ya en este palo se dejó ir detrás de su propia voz para darlo todo, perfectamente acompañada por un excelente plantel de músicos flamencos.  De fondo, la imagen que sirve de portada al disco.
Muy pronto, la cantaora almeriense quiso dejar constancia de su poderío optando por los cantes esenciales en los que dio la talla con su notable nivel técnico y su ángel. Soleá, seguiriyas y una granaína muy sentida que dedicó a sus padres.
Rocío demostró una vez más su perfecto entendimiento con cantes de esta familia.  Luego, contó por alegrías pensando en los suyos, en un tema en el que se arrancó sólo con el acompañamiento del piano. Algo que haría después, deparando momentos muy especiales. Momentos en los que Rocío Segura meció los cantes con maestría y se fue con ellos hasta donde quiso de la mano de su inspiración Hizo también una zambra y cantó por milongas recordando a su abuelas, confirmando otro de sus rasgos artísticos como es la identificación con sus raíces familiares.