Manuel Martín Cuenca recibe el homenaje del Festival de Málaga

Es una de las voces “más personales e innovadoras” del cine español, autor de una “sugerente filmografía”, tanto en el documental como en la ficción, que le ha valido el “reconocimiento nacional e internacional”. Esos son los rasgos que el Festival de Málaga destaca en Manuel Martín Cuenca (El Ejido, 1964) para concederle en su decimosexta edición el premio ‘Eloy de la Iglesia’, que recibirá esta noche en el Teatro Cervantes de la ciudad andaluza.

“Es un reconocimiento a directores de ‘mediano’ recorrido que se caracterizan por su nivel de exploración y búsqueda cinematográfica: el año pasado se lo dieron a Cesc Gay y el anterior a Isaki Lacuesta. Recibirlo es una sorpresa y un bonito regalo”, asegura el director de ‘La flaqueza del bolchevique’ y ‘La mitad de Óscar’.

El galardón lleva el nombre de Eloy de la Iglesia, uno de los autores más singulares del cine español, responsable de títulos como ‘El pico’ o ‘La estanquera de Vallecas’. Un cineasta que, como Martín Cuenca, siempre se movió en los márgenes de la industria. “No soy un director comercial ni tampoco creo en el público en general sino que las películas se hacen para un público concreto. Este premio da valor a trayectorias así”, dice el almeriense, quien recuerda que el Festival de Málaga le ha tratado “con cariño” desde sus inicios. “Aquí estrené y gané con mi primer documental, ‘El juego de Cuba’, y luego volví con ‘Carrillo’, que también tuvo una excelente acogida”.

Para Martín Cuenca, el Festival de Cine Español de Málaga es “una referencia para la industria española” y uno de los más “afianzados” del país, prueba de que “se han hecho muy bien las cosas, pensando a largo plazo”.

En cuanto al futuro de la industria española asegura que es “complicado como el futuro del país” aunque considera que hay que “pelear y seguir adelante”, ya que la ilusión es “el mayor capital” de los cineastas.

Los ecos de ‘Caníbal’
Manuel Martín Cuenca comenzará a montar el lunes su cuarto largometraje de ficción, ‘Caníbal’, rodado íntegramente en Granada con Antonio de la Torre en la piel de un sastre con doble vida.

“Es su primer protagonista, algo que no había hecho antes. Se ha sumergido de noviembre hasta abril: primero preparando el papel y viviendo en Granada y luego estando presente todos los días del rodaje. Lanzarte al agua con todo compromiso, dándolo todo, es esencial en una película”, concluye el director y guionista.