Hablar con Mari Pili es hacerlo al son de la música. Ése es el único modo en el que ella entiende la vida. Según confiesa a LA VOZ, “es muy raro, todo lo que pienso en mi cabeza va con música, no entiendo otra cosa”. Dicen que con talento se nace y en su caso la máxima se cumple, no en vano posee el mejor expediente académico de la historia del Conservatorio de Música de Almería. Ahí es nada.
Su virtuosismo lo pone en práctica con la flauta con la que entró en contacto con apenas 7 años. “Fue con mi padre porque el tenía una flauta antigua y además tenemos muchos instrumentos en casa”. De casta le viene al galgo y nuestra protagonista además decidió poner en práctica su capacidad en piano: “Los profesores me lo recomendaron porque además me sirve para lo que yo quiero hacer realmente que es la composición”. “La composición es la base de la música, los intérpretes están al servicio de ellos y creo que es lo que mejor se me da”, declara risueña.
Vocación
El suyo es un oficio sacrificado y en muchas ocasiones poco reconocido o valorado pero eso no le resta ni un ápice de entusiasmo. “Soy consciente de que es difícil, sacrificado y con mucho riesgo. Pero yo creo que es como cualquier profesión, haré oposiciones para profesor de conservatorio sabiendo que dedicarme a la composición profesionalmente es más difícil pero si empiezas y consigues fama ... si no de todas formas haré lo que me gusta”.
Esfuerzo
Mari Pili dedica al día en torno a una hora para cada instrumento y varias a componer. “Ya he estrenado una marcha de procesión y todas las piezas que componemos en clase las interpretamos en un concierto. He tenido muchas experiencias con el público y me produce mucho orgullo ver una obra estrenada. Sobre todo una marcha”. Fue con la Banda municipal de Níjar (de la que forman parte casi toda la familia) el pasado año y también sus acordes sonaron en la Banda de Música de Jódar.
Entre sus autores de referencia señala a Claude Debussy y respecto a su inspiración no tiene dudas: “El Barroco, porque es una música que todavía no está definida, es más libre, no hay tonalidad, se está experimentado continuamente. Ahora se está volviendo otra vez a esa ruptura de las normas”.
Futuro Ya ven que pese a su corta edad, 18 años, Mari Pili pisa fuerte en el camino. Su talento más que prometedor comienza ahora otra etapa; su formación en el Conservatorio Superior de Granada al que ha accedido con la mejor nota, el mejor expediente en las pruebas de clasificación ante el tribunal. “A partir de ahora empiezo una carrera universitaria, aunque mucha gente no la valora. Pero es exactamente igual”, reivindica la joven.
Ella aún no lo sabe pero ya ha empezado a componer los acordes que pondrán la música de su vida.
"Es trabajadora, disciplinada y atenta”
Mª Carmen Reverte es profesora de flauta del Conservatorio de Almería y ha seguido la evolución de Mari Pili desde hace 10 años. De ella destaca que “desde muy pequeña ha sido trabajadora, disciplinada y atenta, es más nunca ha tenido una mala racha”. Consciente de que los estudios de música son complicados, tiene claro que capacidades no le faltan para obtener éxito: “Tiene cualidades y una sensibilidad especial a la hora de tocar. Tiene mucho talento y cuando uno es músico lo es para todo”.
Consulte el artículo online actualizado en nuestra página web:
https://www.lavozdealmeria.com/noticia/5/vivir/87048/todo-lo-que-pienso-en-mi-cabeza-va-con-musica