El efecto Paco Herrera

Creo recordar que fue la temporada 2002-2003 cuando en el Juan Rojas el Poli Ejido de Paco Herrera vivía su temporada más tranquila en la Liga Profesional y el Almería se jugaba el descenso.

Era la última jornada de la temporada y el empate era suficiente para los rojiblancos pero desde el Poniente llegaban malos vientos en forma de no regalar nada al rival. Era el derby.

Cuando toda España y los equipos implicados daban por hecho un PASTELEO empezaron a sonar primas de terceros al Poli Ejido y hasta su presidente, Gaby Hidalgo, manifestaba que “una cosa es ser clubes hermanos y otra bien distinta hacer el primo”. Ese partido no acabó con el pitido final del árbitro.

Aquel Poli de Paco Herrera con los deberes hechos se puso por delante en el marcador y puso al Almería en Segunda B hasta que llegó el gol salvador de Paco Luna.

Creo recordar que Paco Herrera reconoció una prima especial por ganar el derby pero esto ya forma parte del pasado y ahora nos preocupa el presente.

El bueno de Paco Herrera, siempre le he considerado un señor de los banquillos, vino muchos años después al Mediterráneo para medirse a un Almería no tan al límite pero ahogado en su mala clasificación.

Herrera, con más años y más experto, no bajó al Almería ganando con el Valladolid pero igual puso la primera piedra de un descenso anunciado: desnudando al equipo de Ramis ante su afición.

Tiene mucha Mili Paco Herrera y si antes casi manda al Almería con su Poli Ejido a Segunda B, igual ahora ha dejado en el mal camino a los rojiblancos.

El efecto Herrera sigue siendo negativo para el Almería. Él no tiene la culpa pero hasta con el Celta nos metió CUATRO en Balaídos y se cargó el play off de los almerienses.

Con Herrera no hay manera.