Ante todo, medidas de seguridad frente al auge de la quinta ola de coronavirus y un distanciamiento ‘social’ que no deslució para nada el ‘mágico’ momento de acceder a la misma cancha de juego ocupada por los Red Lynxes. Los ídolos del combinado nacional masculino de voleibol, recién llegados para realizar un ‘stage’ de diez días en la ciudad pensando ya el Campeonato de Europa que se disputará del 1 al 8 de septiembre en Finlandia, completaron este lunes su primera sesión en el Palacio de los Juegos Mediterráneos. Lo hicieron sin quitarse la mascarilla en ningún momento, evitando riesgos, y compartiendo tanto el principio como el final con los participantes del ‘Verano Voleibolero’ gratuito organizado por Unicaja Costa de Almería.
Así, los jugadores convocados por Ricardo Maldonado se distribuyeron en la típica distribución de circunferencia a un lado de pista y, una vez ubicados y listos, accedió el grupo de canteranos inscritos en la actividad ahorradora, que los rodearon a dos metros de distancia para ponerse también a las órdenes de Miguel Rivera. El técnico asistente de los Red Lynxes, primer entrenador de Teruel, dirigió el calentamiento y lo hizo con la gentileza de estar atento no solo a los seleccionados, sino también a las chicas y los chicos de Áxel Mondi, Miguel Trujillo y Paco López, presentes para coordinar las entradas y salidas de sus pupilos. No en vano, presenciaron todo el entrenamiento desde la grada para participar también de los estiramientos finales.
Después de varios ejercicios de activación sin desplazamientos, formando selección y canteranos dos circunferencias concéntricas, Rivera dio orden de separar sendos grupos a un lado y otro de la red, realizándose la parte de desplazamientos desde el fondo de cancha hasta la línea de tres metros, salvaguardando también en la fase final la distancia de seguridad. Realizado el calentamiento completo, el mismo que la Selección Española, las jugadoras y los jugadores canteranos, los ‘miniverdes’ y los que previamente a este verano no habían tenido vinculación con Unicaja Costa de Almería, salieron de manera ordenada de la zona de cancha hacia el graderío, desde donde presenciaron la sesión con gran interés y muchas preguntas.
Después de aproximadamente dos horas de trabajo
Con una sucesión de acciones destinadas a la activación paulatina del grupo y mucho control de balón, puesto que era el primer día tras unas breves vacaciones, llegó el cierre de la sesión. Todos los canteranos bajaron de nuevo una vez que el corro de seleccionados hizo el grito de ‘¡España!’ y volvió a situarse en círculo, incorporándose en la misma distribución del principio para realizar los estiramientos, dirigidos en ese caso por Jorge Soriano. El fisioterapeuta de Unicaja Costa de Almería, perfecto conocedor de la emoción que para los chicos y chicas suponía una oportunidad así, igualmente estuvo atento a la correcta realización de las acciones por parte de todos, que acabaron con aplauso.
El punto y final a la actividad fue una fotografía de familia para el recuerdo, realizada en dos filas y también sin mezclar sendos grupos por motivos de seguridad. Burbuja respetada, pero ilusión cumplida, se hizo realidad el anuncio formulado por Unicaja Costa de Almería al inicio de su actividad veraniega gratuita el pasado día 1 de julio, cuando se advirtió de que iba a haber una grata sorpresa para los participantes. Se tenía planificado, pero no se quiso desvelar hasta poder cerrar todos los flecos y ver que iba a ser posible finalmente, siempre atentos a la evolución de la pandemia y a la viabilidad del encuentro según las medidas de seguridad obligadas. Este ‘Verano Voleibolero’ continuará sus entrenamientos, que avanzan con éxito de participación y aprendizaje, y durante la próxima semana y media tendrá al lado a los Red Lynxes.
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