Mirar la clasificación de la Liga BBVA da auténtico vértigo, especialmente si se pone el objetivo en los puestos de descenso. Cuando quedan siete jornadas, 70 partidos y 630 minutos de fútbol para cada uno de los implicados, media Primera se está jugando su permanencia en la categoría.
Estableciendo el corte en los 40 puntos que tienen ahora mismo Valencia, Espanyol y Levante (virtualmente salvados y con remotas opciones europeas, ya que están a nueve del Villarreal), el resto de equipos tienen como objetivo no sufrir en las siete jornadas que restan.
Los 10 protagonistas son Celta (36 puntos), Málaga (35), Granada (34), Rayo (33), Elche (32), Getafe (31), Valladolid, Osasuna y Almería (30) y Betis (22, tras caer ante el Málaga en el tramo final).
En las últimas 14 temporadas, desde que se suprimió la promoción y descienden tres equipos, el promedio de puntos necesario es de 41,35, muy cerca de 42, por lo que el Celta no se puede dar por salvado, aunque el Betis lo tiene ya casi imposible.
De los 70 encuentros que quedan, 18 serán duelos directos entre los 10 implicados, lo que promete un final de Liga auténticamente de infarto, ya que en cada una de las siete jornadas que restan por disputarse habrá, como mínimo, un choque en el que se jugarán todo a cara o cruz.
En esta carrera por eliminación, el objetivo es librarse cuanto antes para poder disfrutar otro año en Primera.
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