Nunca entenderé la extraña habilidad de esta tierra y de sus equipos para repetir errores. Estaba pensando antes del partido en lo sucedido en el partido anterior de la madrugá, aquel Almería-Elche que acabó con empate polémico sobre la bocina.
Logré evadirme cuando el Espanyol se quedaba con uno menos y daba un peligroso paso atrás que tenía claro nos llevaría a la victoria. Cuando Soriano adelantó al Almería el Espanyol bajó los brazos y el segundo era cuestión de tiempo pero...
Llegaba el apagó típico de Feria (de tantas Ferias) y me volvían a rondar los partidos feriados que nunca se ganan. Los más de diez minutos cuando mejor estaba el Almería era justo lo que necesitaba su rival para frenarlo.
Pero esta vez no todo lo hizo el Espanyol ya que tenemos unas habilidades ocultas que nos llevan a la decepción. El punto del Espanyol se empieza a fraguar cuando Hemed, Soriano y Edgar reinan en el área rival pero aparece el cartelón de Soriano por Teerasil. Me quedé de piedra.
Ese cambio alivió las angustias del Espanyol y el Almería daba un paso atrás que le costaría el empate o “la derrota” como decía Francisco.
Este año no quiero hablar de fútbol ni de tácticas ni nada. Ni con Rafa, ni con Carlos ni siquiera con mi mujer que es abonada y no hemos cruzado palabra.
Es verdad que dio dos minutos más por la cara el árbitro pero hay que estar preparados para ello y aprender de los errores. Justo un año después en descuentos no aprendemos y lo peor de todo es que empiezas ganando y despegas mientas que las sensaciones del sábado son las mismas que las recibidas por la derrota ante el Villarreal.
Consulte el artículo online actualizado en nuestra página web:
https://www.lavozdealmeria.com/noticia/6/deportes/66655/el-almeria-se-apago-el-solito