Hacienda coloca al Zaragoza en puertas de la liquidación

Situación límite en el Real Zaragoza. El presidente representativo, Christian Lapetra, el vicepresidente Fernando Sainz de Varanda Alierta y el consejero Fernando Rodrigo dibujaron ayer un escenario apocalíptico para la sociedad anónima deportiva, que se encuentra de nuevo en claro riesgo de disolución después de que la Agencia Tributaria haya solicitado —en vía de apremio, con intereses y un recargo del 20%—, el pago este lunes de 25 millones de euros, correspondientes a los 18,5 millones de la deuda histórica que vencieron el 5 de septiembre. En caso de incumplimiento, Hacienda procederá a un embargo por la mencionada cantidad, lo que impedirá al club atender el gasto corriente y las nóminas de sus empleados y futbolistas y le colocará al borde de la liquidación.

La comunicación de Hacienda ha causado estupor en el Zaragoza, especialmente después de que Soledad García, directora del departamento de Recaudación, hubiera abierto la semana pasada un resquicio en la compleja negociación con la Agencia Tributaria sobre la deuda histórica, solicitando la presentación de un plan de viabilidad y un calendario de pagos para liquidar el total del pasivo (30 millones) en ocho años, aplicando un nuevo convenio singular como tiene, por ejemplo, el Valladolid. Sin embargo, cuando el Zaragoza tenía todo previsto para presentar ese plan de viabilidad el próximo martes en la sede central de la Agencia Tributaria, el inesperado giro de Soledad García deja al club sin capacidad de reacción y en el peor escenario posible, a expensas de una reunión de urgencia con el secretario de Estado de Hacienda, Miguel Ferre, para impedir la liquidación.