Los jugadores de la selección portuguesa de fútbol guardaron hoy un minuto de silencio por la crisis de refugiados en Europa durante el entrenamiento previo al enfrentamiento contra Francia de este viernes.
El estadio António Coimbra da Mota de Estoril fue el escenario en el que jugadores y cuerpo técnico reflexionaron "sobre la brutalidad de la situación y las imágenes que llegan" de refugiados, según explicó la Federación Portuguesa de Fútbol en un comunicado.
El evento tuvo lugar antes de comenzar la sesión de entrenamiento previa al partido amistoso contra Francia que se jugará el viernes a las 19.45, hora local, en el estadio José Alvalade de la capital lusa.
El gesto de la selección lusa de fútbol se suma a otros muchos en toda Europa para mostrar la solidaridad con los miles de refugiados, en su mayoría procedentes de Siria, que buscan acceder a Europa a través de diferentes rutas y que están protagonizando la mayor crisis migratoria de los últimos años.
Ayuda del Bayern: un millón de euros
El Bayern de Múnich alemán donará un millón de euros para ayudar a los inmigrantes y pondrá en marcha un campamento para aquellos que lleguen a la ciudad, una vez que el número está aumentando con el paso de los días.
Miles de personas, en su gran mayoría procedentes de Siria, han llegado a Alemania, un país que en 2015 espera recibir 800.000 personas pidiendo asilo, a través de Hungría y Austria, con la estación de tren de Múnich como uno de los principales puntos de entrada.
"El FC Bayern ve dentro de su responsabilidad social para ayudar a aquellos hombres, mujeres y niños que están huyendo y sufriendo para apoyarles y acompañarles en Alemania", apuntó el CEO del conjunto bávaro, Karl-Heinz Rummenigge, en un comunicado.
La Academia de Jóvenes del Bayern acogerá un campamento para niños, en conjunción con la ciudad de Múnich, y ofrecerá también comidas y clases de alemán. Además, el primer equipo, entrenado por Pep Guardiola, saltará al terreno de juego acompañado por niños inmigrantes en su próximo partido en la Bundesliga ante el Augsburgo el próximo 12 de septiembre, mientras que el club está planeando un amistoso para recaudar un millón de euros para ayudar a estas personas.
"El FC Bayern está tomando una postura y soy feliz por su implicación. Esto es por lo que felizmente aprobé el apoyo de la ciudad", señaló el alcalde de Múnich, Dieter Reiter.
Además, la Asociación de Fútbol de Alemania (DFB) emitió el miércoles un video en el que condenaba cualquier ataque a los inmigrantes o en sus alojamientos en Alemania, o en cualquier forma de xenofobia. Un partido amistoso entre empleados de la federación y un equipo formado por refugiados también está entre las ideas a llevarse a cabo.
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