Góngora y Pastor: premios más emotivos de la Gala

Los grandes presidentes a nivel federativo y de clubes no serán olvidados por Almería

Pedro Pastor Medina el eterno presidente del Macael.
Pedro Pastor Medina el eterno presidente del Macael.
Tony Fernández
01:00 • 16 dic. 2015

Ha reservado Martín Doblado un lugar destacado para aquellos presidentes que marcaron época. Unos desde el sillón presidencial y otros al frente de los clubes. Hombres que vivirán los momentos más emotivos en una Gala del Centenario diseñada para ellos y que pretende por encina de todo “dejar constancia del agradecimiento de todos hacia los que fueron nuestro pioneros en esto del fútbol y que nunca debemos de olvidar”.




Paco Góngora




Uno de los grandes presidente de la Federación fue Paco Góngora. En su despacho dio vida a la Agrupación Deportiva Almería de la que luego fue su secretario general. Góngora hizo posible que Arenas, Pavía y Puls Ultra se unieran para formar un club que nos llevaría a Primera siendo él uno de los pilares del éxito.
Almería no debe olvidar jamás la vida y la obra de un hombre del fútbol que estrechó lazos de unión con el Barça en una época dorada para el fútbol almeriense.




Pedro Pastor




No necesita presentación. El Atlético Macael primero y el Mármol después tuvieron el privilegio de disfrutarlo. Marcó época con los mejores futbolistas siempre en sus filas y siendo algo más que un dirigente deportivo ya que ayudó a los jugadores a tener una vida mejor.
En Macael es el más grande y en la provincia de Almería se le rinden honores por su sabiduría futbolística. Pero si ha destacado por algo Pedro Pastor ha sido por su bondad, por ser un hombre entregado a los demás, y comprometido con su Almería.
Ahora vive retirado de la escena pero no falta cuando las fuerzas se lo permiten a los partidos del Comarca o se da una vuelta para ver al Almería del que siempre fue abonado. La historia no se puede escribir completa si falta un hombre que en la Gala les va a emocionar con su palabra.




Gaby Hidalgo




El Poli Ejido tuvo un presidente inolvidable al que el fútbol no le hizo justicia. Gabriel Hidalgo Martín fue desde niño seguidor celeste y alcanzó la presidencia bebiendo de las fuentes de sus antepasados en el cargo.
Hizo tan grande a su Poli que lo colocó a las puertas de la Primera División. En El Ejido nadie le ha puesto una calle ni le han descubierto una placa cuando se partía la cara por su ciudad. Gaby siempre será el más grande.
 





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