La voz cantante del grupo

Ninguna persona está exenta de hacer tonterías. El ser humano es imperfecto y en ocasiones no controlamos el alcance de nuestros hechos. El problema viene cuando deliberadamente actuamos de manera insensata. Por eso llama la atención que los concejales del Grupo Municipal Socialista hayan centrado últimamente su lógica labor de oposición en la limpieza de los parkings, en lugar de haberse centrado en otro aspecto. Que un aparcamiento público deba limpiarse más -o mejor- es una cuestión razonable dentro de la dinámica municipal de fiscalización política. Ahora bien, la imprudencia a la que me refería antes es haber escogido precisamente este asunto, cuando el PSOE municipal almeriense está dirigido por alguien que es, a la historia de los aparcamientos públicos, lo que Atila al crecimiento de la hierba. Haga la prueba: pronuncie en voz baja los apellidos “Pérez Navas” en Rambla Obispo Orberá, y comprobará que las capas freáticas del subsuelo se remueven inquietas, como cuando pasa un autobús por la cubierta de ese parking que el señor Pérez Navas anunció, prometió y jamás pudo hacer. ¿Acaso no saben los concejales del PSOE que el tema de los aparcamientos subterráneos es mejor no tocarlo, para evitar que la gente recuerde la pésima gestión que acreditaron en esta materia durante sus largos años de gobierno municipal? Otra cosa distinta es que el riesgo de avivar estos fantasmas sea asumido de modo consciente por las concejalas y concejales del PSOE, para aprovechar así las reiteradas ausencias de su portavoz-senador, intentando capitalizar la atención mediática mientras su líder está en Madrid, en su escaño senatorial, debatiendo asuntos de hondo calado, como aquella inolvidable queja suya por el declive del Festival de la Canción de Eurovisión. Por eso, y ya que estamos en tema musical, sería interesante que en el Grupo Municipal del PSOE se aclarasen de una vez acerca de quién lleva allí la voz cantante, si el señor Pérez Navas o el Trío La-La-La.