La sostenibilidad de los espacios verdes urbanos

Los sistemas urbanos constituyen un gran reto de futuro si consideramos la sostenibilidad como objetivo de una ciudadanía comprometida con una sociedad  solidaria y un ambiente seguro para todos los seres vivientes y silientes. Hay que pensar la ciudad y rediseñarla, dotándola de más medios y acercándola a los sistemas próximos de la Naturaleza, partiendo de conocimiento científico y tecnológico, aumentando su naturalización, para lo que la biodiversidad es el mejor indicador.
Nos tenemos que enfrentar a los problemas de las propuestas urbanísticas, heredadas o nuevas, desde una perspectiva innovadora, contemporánea, científica y ecológica; desde un punto de vista de lo social, estético y bioeconómico para su planificación y gestión. Definir la tipología del sistema verde urbano desde la planificación, proyecto, mantenimiento y gestión nos darán las pautas para sus funciones ambientales y sociales atendiendo a criterios estéticos, vegetativos, hídricos o de uso. 
Al pensar en lo verde no podemos olvidarnos de la ciudadanía, la cual tiene que saber el por qué de las actuaciones de mantenimiento e, incluso, de los cambios que se producen en las zonas ajardinadas, como por ejemplo con las podas de árboles en las ciudades. La participación ciudadana es una actuación indispensable en la gestión sostenible de los parques y jardines públicos: se tienen que sentir vinculados para que haya, además, una mayor protección de los mismos. El conocer tanto sus funciones como los beneficios sociales, sus usos y los valores de las zonas verdes públicas, la tipología y su gestión así como los recursos destinados, tiene que ser conocido por todos los agentes implicados en la sociedad, para que haya un mayor compromiso en la conservación del verde urbano. Y para eso empezamos a repensar y debatir en Dalías, a partir del 5 de Julio del 2017, dentro de los Cursos de Verano que organiza la Universidad de Almería, en el de “Gestión sostenible de los espacios verdes urbanos”, un curso teórico práctico en el que debatiremos: la integración paisajística y minimización del impacto visual, con un caso práctico con “El jardín botánico “La Almunya del Sur”: lugar  para la investigación, la educación y también para la convivencia. Se analizarán las principales especies de las zonas verdes urbanas: especies arbóreas, arbustivas y herbáceas. Las construcciones biosostenibles, la gestión de la biodiversidad en las zonas verdes, la flora autóctona con fines ornamentales y  la flora ornamental de nuestros pueblos. 
Al ser humano nos condiciona el lugar donde habitamos; por lo que el binomio ciudad y espacio verde van de la mano. Los términos jardín y urbanismo van íntimamente ligados a las ciudades del siglo XXI y a las funciones ambientales de estos espacios. La ciudadanía tiene una necesidad de “lo verde” y que puede definirse con el término de biofilia, que fue usado por primera vez por el psicólogo E. Fromm, y lo definió como: “la pasión por todo lo viviente”. Esa pasión es una necesidad innata del ser humano por todo lo viviente. Es un vínculo emocional que nos conecta a la Tierra. Y al reflexionar en este vínculo recuerdo al poeta José Ángel Valente en su libro “Palais de Justice”, de Ediciones Galaxia Gutenberg: "Cuando estoy ante la naturaleza pienso que es una forma de tu cuerpo extendido. Me fuiste enseñando despacio los caminos. Las comisuras de los labios que son uno de los más hondos lugares de tu identificación o reconocimiento. El cuello y su blancura. El secreto rumor de tu saliva. La cerviz que se comunica con tu sexo en un solo latido. La palma de tu mano. Tus pies. El vientre. El descenso hasta el vértice de ti, como animal de fondo".