Góngora amenaza con hacer del tema un problema de Estado

No cree el señor Góngora que lo tendría que haber hecho hace mucho tiempo, que llega tarde, que los agricultores ya no creen en su organización, como no creen en los partidos políticos y en todas las organizaciones que han ido naciendo al amparo del campo almeriense. Más de veinte mil agricultores dice la organización, no creo que lo más importante en esta ocasión sea el número. Era necesaria una presencia real y efectiva en la calle del problema almeriense y se ha conseguido. El triste final, con insultos y abucheos entraba en la lógica de lo que se está viviendo en el campo. Traidores, vendidos al poder y a las subvenciones y no habéis hecho nada. Años y años de quejas de los agricultores, de mandar videos con camiones de la vecina Marruecos descargando productos en almacenes almerienses y nadie hacía nada, y nadie levantaba ni siquiera la voz. Reuniones de los líderes con consejeros de ayer, consejeras de hoy y al reparto de las ayudas y subvenciones. Qué extraño, al agricultor le costaba llegar a las mismas. ¿Dónde se quedaban o quién se las quedaba? Dice Asaja que el ministro Planas es un irresponsable. ¿Ayer, hoy? ¿Y los anteriores? Para el agricultor de a pie, el que no se sienta en las mesas de negociación, esta situación la ha generado la clase política. La de Almería, la de Andalucía y la de España. Son todos ellos los que han dejado abandonado este campo en manos de terceros países, son ellos los que no han defendido ante Europa nuestros productos. Cobardes como siempre ante sus jefes de Sevilla unos, ante los de Madrid otros y ante Europa los restantes. Sánchez Teruel: siempre estaremos en el mismo sitio, defendiendo a los almerienses. Sería preferible no decir según qué cosas, señor Teruel. Ya no engañan ustedes a nadie. Se vieron caras de alcaldes asustados ante el futuro político que les puede esperar y es que les llegaban los gritos de los agricultores: “eres el único que tienes cojones” dedicado a Abascal, que se desplazó hasta Almería para estar durante un rato con los agricultores almerienses. A los demás líderes regionales o nacionales no se les vio el pasado martes por esta tierra. Luego se quejan cuando el personal se cansa de votarles y busca otras alternativas. Ellos, tristemente, se lo vienen buscando día a día con sus silencios y paños calientes.