Subir la persiana

Durante el confinamiento que vivimos los españoles entre marzo y mayo, el comercio local, especialmente el de alimentación, se convirtió en uno de los pilares de nuestra economía. Mientras la mayoría estábamos en casa, encerrados y con el temor a un virus del que desconocíamos todo, miles de pequeños empresarios, levantaban sus persianas para darnos un respiro y mantener nuestra economía. Es justo que ahora ayudemos a este tipo de comercio.

Y es que el comercio de proximidad en Almería lleva años sufriendo, tanto en el centro como los barrios. Al cambio de hábitos de los últimos años, se le suma la política errática del Ayuntamiento. Pero sus problemas no empezaron con la crisis sanitaria, sino hace años, especialmente en el centro. El punto culminante fue la alfombra roja hacia el Centro Comercial Torrecárdenas inaugurado por el alcalde en 2018, que nacía del corazón de la ciudad y pasaba por delante de decenas de escaparates de nuestro comercio local.

A esto hay que sumar la política de ocurrencias del Ayuntamiento, especialmente con el actual equipo de gobierno. En la oficina de Promoción de la Ciudad, encargada de revitalizar este sector, andan tan perdidos y desesperados que han llegado a culpar a la oposición de la desertización comercial del centro. Sin  palabras. Le recomendamos al equipo de gobierno del PP que escuche más y mire nuestras propuestas, porque solo desde la colaboración y la unidad conseguiremos ayudar al sector. 

Desde el PSOE lamentamos que esa política comercial no tenga una estrategia global y que, hasta el momento, se haya basado en poner colchonetas y payasos, y en dibujar estrellas de colores en el Paseo, algo que evidentemente no ha servido para que el sector recupere su vitalidad. Ahora, el alcalde anuncia nuevas medidas. Bienvenidas sean, aunque son insuficientes, llegan tarde y la mayoría están aún por determinar. Por ejemplo, los famosos patinetes. Y, además, en esta Navidad tan especial, a consecuencia de la crisis, el PP debería impulsar también el consumo, ayudando a las familias con menos ingresos a comprar alimentos frescos en las tiendas y mercados de sus barrios.

Desde hace muchos años llevamos alertando de esta situación. Es cierto que el comercio local de Almería pasa un mal momento, pero no está muerto y creo firmemente que no es demasiado tarde para adoptar medidas que impulsen el centro y con él, toda la ciudad. 

Hay que actuar desde el urbanismo y consolidar el Centro Comercial Abierto como un enorme establecimiento al aire libre. La Cultura, además, debe jugar un papel primordial, con programaciones estables que hagan atractivo el centro. Y con una política que invite a las grandes firmas a instalarse en Almería y así consolidar el comercio de proximidad que se genera a su alrededor. De nada sirve escribir cartas a empresarios si éstos no ven atractivo invertir aquí.  

Dentro de esa estrategia global se debe facilitar la movilidad, favoreciendo el aparcamiento y el uso del transporte público. Y sin duda, hay que fomentar la formación e innovación, ayudar a los pequeños empresarios a dar el salto digital y a avanzar en la especialización. 

Desde el PSOE creemos firmemente en el comercio local, por eso, por tercer año consecutivo, reactivamos nuestra campaña de apoyo, y transformamos la web “Los zapatos de Lola” en un escaparate virtual gratuito para que puedan llegar a los hogares almerienses. Mantenemos así nuestro compromiso con los pequeños empresarios para ayudarles a subir la persiana de sus negocios cada día.