Almería avanza junto al mar

Los almerienses acabamos de ver la conclusión de una obra que era largamente esperada por todos: la prolongación del Paseo Marítimo hasta la desembocadura del Río Andarax. Una actuación cofinanciada entre el Ayuntamiento y el Gobierno de España que en breve será abierta al público para el disfrute de todos.

Una actuación como digo muy esperada que se hace realidad a pesar de los inconvenientes que han acompañado su ejecución, y que no nos deben hacer olvidar que nos permite multiplicar y mejorar nuestro Paseo Marítimo, que alcanza así los 3,5 kilómetros desde el Cable Inglés hasta la desembocadura del río, zona que será objeto de una próxima intervención que haremos en colaboración con la Diputación Provincial. Y creo que es justo destacar que cuando el objetivo compartido es el beneficio de los almerienses no deben existir colores ni disputas políticas entre administraciones de distinto signo.

Por eso no sólo estoy muy satisfecho por el resultado de unos trabajos que enriquecen de manera considerable la franja litoral urbana de Almería, sino que también me alegra que un proyecto tan importante haya podido culminarse con éxito desde el entendimiento y la voluntad de colaboración entre dos administraciones de signo político diferente. En unos tiempos en donde el diálogo y la colaboración leal entre administraciones gestionadas por dos partidos políticos enfrentados parece algo imposible, creo que es una excelente noticia que en Almería hayamos demostrado que es posible sumar esfuerzos desde la discrepancia política. Y como resultado de todo ello, Almería avanzará junto al mar recuperando y regenerando un espacio de alto valor medioambiental y paisajístico, que está destinado además a convertirse a corto plazo en uno de los puntos de más interés urbano de Almería.

De hecho, hemos mejorado las condiciones del frente marítimo del Delta del río en el tramo comprendido entre la Boquera de la Higuera, que es el final de la ya ejecutada primera fase y su desembocadura en el mar. Damos así continuidad al itinerario costero en dirección al Camino de Ribera, al tiempo que garantizamos la recuperación ambiental de una superficie importante del Delta.

Una actuación que contempla dos partes, pues de un lado se prolonga el Paseo Marítimo peatonal y el carril bici, al tiempo que generamos la recuperación como playa de una franja litoral de una anchura entre los 50 y los 200 metros. Esta parte del proyecto contempla además una gran plaza mirador con fuente ornamental, zonas ajardinadas, la plantación de casi 200 árboles y nuevos accesos a la playa, así como una zona de juegos y un espacio de aparcamiento que incluye plazas para movilidad reducida. En definitiva, estamos ante otra gran noticia para la ciudad de Almería, que debemos entender en el nuevo contexto que supone la revalorización de conceptos como el paisaje costero o la calidad de vida.

Todo ello nos permite reconsiderar nuestra relación con el frente marítimo y cambiar la percepción de que Almería ha vivido de espaldas al mar. Ya es hora de volver a ponernos de cara a él y aprovechar su enorme potencialidad para seguir  transformando nuestra ciudad con proyectos como el Puerto Ciudad o la prolongación del Paseo Marítimo hasta su futura conexión con la Universidad. Sigamos avanzando mirando al mar.