Las heroínas de El Hierro

Más de la mitad de los lectores de prensa se informa ya casi exclusivamente a través de digital

José Luis Masegosa
09:00 • 07 nov. 2022

A mediodía de ayer acudí a comprar el periódico del día al único kiosko que, en un radio de varios kilómetros, sobrevive en el barrio que habito a la indiferencia de una sociedad amaestrada por la tecnología. El debate sobre el periódico digital versus formato papel está más vivo que nunca y es objeto de análisis y estudio por parte de empresas, profesionales y consumidores de información. Nadie es ajeno a que el desarrollo tecnológico ha implementado nuevos hábitos de consumo de la información.  



Desde hace tiempo, al inicio de cada curso en la Facultad de Comunicación donde imparto algunas materias de Comunicación y Periodismo, interrogo a los alumnos acerca del medio que suelen utilizar para recibir información y, lógicamente, aunque parezca una anticuada cuestión del pasado, pregunto a los boquiabiertos estudiantes por la utilización del periódico impreso. La respuesta, no por esperada, chirría a la sensibilidad de quienes nunca concebiremos nuestra vida sin la inseparable y saludable compañía de un periódico de los de siempre, de papel y tinta, aun cuando esté herido de muerte. Y no por mero romanticismo, sino por cuanto ha significado en nuestro devenir vital y profesional. Algunos de estos futuros comunicadores tienen la honestidad de reconocer que solo han visto semejante medio en manos de sus abuelos, y, muy pocos, en manos de sus padres.



Con tales respuestas  no es de extrañar que la búsqueda de un kiosko  tradicional resulte más complicada que encontrar una aguja en un pajal, y que estos establecimientos se hayan  sometido a una absoluta reconversión. Más de la mitad de los lectores de prensa se informa ya casi exclusivamente a través de diarios digitales.



Con este panorama, es, cuando menos loable, la persistencia de las dos únicas librerías-papelerías de la isla de El Hierro donde se expende el periódico –Tania y Betania- que han logrado un acuerdo entre el Cabildo, Binter y la empresa distribuidora para que el diario de siempre acompañe al café de cada mañana. Toda una heroicidad.







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