Claro que caben

Lamento sinceramente no poder compartir la teoría de la falta de acomodo para nuevos tontos en España. Por sorprendente que parezca, el número de bobos se multiplica sin que se produzcan colisiones o apreturas. Pero pongámonos serios. Los científicos estadounidenses ganadores del Premio Nobel de Física en 2011, Saul Perlmutter, Brian Schmidt y Adam Riess, demostraron recientemente que el universo se expande a gran velocidad, por lo que podemos confiar en que siempre habrá espacio para un tonto más. Me gustaría complementar ahora este descubrimiento (lo del espacio, no lo de la tontuna) con una aportación propia que no es sino una reinterpretación de la famosa Ley de Lavoisier, científico francés considerado padre de la Química,  que llegó a la conclusión de que la materia, medida por la masa, no se crea ni destruye, sino que sólo se transforma en el curso de las reacciones. Apliquemos al concepto “masa” los valores de la idiotez para trasladarlos a la escena política actual y comprobarán que, efectivamente, la imbecilidad no se crea ni se destruye, sino que simplemente se transforma. Tomemos como ejemplo esa iniciativa de los eurodiputados catalanes Ramon Tremosa (CIU), Maria Badia (PSC), Raúl Romeva (ICV) y Ana Miranda (en representación de ERC) que han pedido a la Unión Europea que impida una acción militar española contra el proceso independentista que unos irresponsables están queriendo poner en marcha en Cataluña. Para justificar su miedo a una invasión, dicen estos lunáticos que en los últimos días ha habido “vuelos intimidatorios” de cazabombarderos españoles sobre el espacio aéreo catalán. Increíble, pero cierto. Para confirmar mi teoría sobre la transformación de la sandez, basta con apuntar que estos majaderos son los mismos que querían que Bruselas sancionase a un defensa del Real Madrid por un lance del juego sobre un jugador del Barcelona. ¿Ven como sí que caben más tontos? Lo malo es que usted y yo somos los que le pagamos a estos caraduras un magnífico sueldo que, a la vista está, no emplean en medicación o terapia. A ver si al final los tontos vamos a ser usted y yo.