Teatro del Siglo de Oro en Almería

Antonio Serrano, Ascensión Rodríguez Bascuñana… 30 años de historia del Teatro del Siglo de Oro. Almería en el Tiempo no puede olvidar el trabajo, el esfuerzo y la lucha por la cultura en nuestra tierra y este el motivo de nuestro artículo de hoy: pretendemos rendir homenaje a todas aquellas personas que, contra viento y marea, siguen manteniendo viva la ilusión por lo más profundo de la vida, por la poesía, por la literatura, por el arte, por el teatro, por la historia, por el cine… y, en definitiva, por lo que nos acerca más a la categoría de seres humanos. 

Como han destacado consumados especialistas, a través del comité organizador de los Premios Max de Artes Escénicas, las XXXII Jornadas de Teatro del Siglo de Oro en Almería son merecedoras del Premio Max de la Crítica 2013 por la labor de recuperación y actualización del Teatro Clásico Español siempre presente en las Jornadas desde su origen. 

Recuerdo a Antonio Serrano, ese gran profesor de la antigua Universidad Laboral, dando el paso de la teoría a la práctica a través de la puesta en escena. Así nació este Siglo de Oro del teatro almeriense. Obras inmortales y grandes actores han pasado por aquí a lo largo del tiempo y la Compañía Nacional de Teatro Clásico, a la que tuve oportunidad de ver con El Alcalde de Zalamera, de Calderón de la Barca, con los Gutiérrez Caba como grandes intérpretes o El Brujo, Celestina, El Idiota de Molière, Ricardo III y tantas otras. No quiero ni acordarme de aquellos trágicos momentos de 2010 y 2011: las Jornadas comenzaron a correr peligro de desaparición cuando la Obra Social de Unicaja, después de 27 años de apoyo incondicional, decidió retirar la financiación con expresiones tan desafortunadas como aquella de: “Ya podrían haber aprendido a andar por sus propias patas”. 

Creo que, después de esta excelente puesta en escena de 2013, el Teatro Clásico del Siglo de Oro no volverá a correr peligro en Almería. Pero, queridos lectores, sigamos con el tiempo histórico y literario: Por aquí han pasado “El secreto a voces”, “Rosaura”,  “Casa con dos puertas mala es de guardar”, “Dar Tiempo al Tiempo”, “Amar después de la muerte”, “El Gran Teatro del Mundo”, “La Dama Duende”, “El mayor hechizo, Amor”, “La Vida es Sueño” y “El Alcalde de Zalamea” (Calderón de la Barca); “La Dama Boba”, “Fuenteovejuna”, ”La Gatomaquia”, ”El Amor Enamorado” ”El Maestro de Danzar”, “El Perro del Hortelano”, “El Castigo sin venganza” y “Peribáñez” (Lope de Vega); “Entremeses”, “El Retablo de Las Maravillas”, “El Celoso Extremeño”, “La Entretenida”, y “Don Quijote”  (Cervantes); “El Vergonzoso en Palacio”, “El Burlador de Sevilla” “El Condenado por desconfiado”, “Los Amantes de Teruel”, y “Don Gil de las Calzas Verdes” (Tirso de Molina); “Medora” (Lope de Rueda); “Entre Bobos anda el juego” (Rojas Zorrilla); “El Lazarillo de Tormes” con el Brujo; “El Lindo Don Diego” (Agustín Moreto);  “Romeo y Julieta”, “El Sueño de una Noche de Verano”, y “Macbeth” (Shakespeare); “La Celestina” (Fernando de Rojas); “El Tartufo”, “El Enfermo Imaginario” y “El Atolondrado” (Molière); “Cantos y Cuentos del Decamerón” (Boccacio); “El Buscón” (Quevedo); “Hansel y Gretel” (Grimm); “La Historia Secreta de los Tres Mosqueteros” (Dumas); “La Verdad Sospechosa” (Ruiz de Alarcón)… No se puede pedir más calidad ni más esfuerzo. El 6 de abril de este 2013 tuve la ocasión de asistir al repleto Auditorio de nuestra capital para contemplar la grandeza de nuestro Teatro Clásico con “La Vida es Sueño”, esa majestuosa obra calderoniana que arrancó continuados aplausos con una Blanca Portillo sublime. Los almerienses hemos podido comprobar que nuestras Jornadas del Siglo de Oro constituyen uno de los festivales anuales más importantes en su género dentro del panorama internacional y que formará parte para siempre de la historia literaria de esta ciudad.