Los americanos

Tiene uno la impresión de que estamos como en el tiempo de los americanos. ¿A qué viene esto? A que parece que volvemos a los años cincuenta y sesenta cuando los americanos ofrecían en los colegios españoles leche en polvo, queso y mantequilla para que desayunaran y merendaran los críos de entonces. Los talegones de ahora no conocieron aquella época, pero fuimos muchos almerienses los que nos criamos (en parte) con estos productos venidos de allende los mares. Algo parecido debe estar ocurriendo hoy en día cuando el gobierno de Andalucía, ese que no es capaz de crear empleo para los padres, tiene que dar desayuno y merienda a los hijos. En la entonces bola azul se repartía leche en polvo entre las familias, ahora son Cáritas y los bancos de alimento los encargados de ello. Y son miles los kilos que se entregan. No estamos como en los años cincuenta o sesenta, es cierto, faltaría más pero el hambre y la necesidad, y no lo decimos nosotros, empiezan a ser un tormento entre muchas familias. Llevamos treinta y tantos años de democracia, o eso nos dicen. Llegamos a vivir en el estado del bienestar, non contaban. fuimos campeones en casi todo, nos decían los soldados de la política. Y nosotros, felices, todo nos lo creíamos. La dura realidad se nos impone. ¿Qué ha pasado para que el hambre vuelva a estar en las calles y en las casas de los ciudadanos? ¿Qué han hecho los políticos en estos años para que se tenga que volver a repartir pan y leche en las escuelas, como en el tiempo de los americanos? ¿Dónde está, en qué se han gastado el dinero que hemos ganado en los años de la abundancia?