¿Dónde está la recuperación?

Almería ha sufrido esta semana el duro golpe de la realidad de las cifras de los desempleados que ha registrado la provincia en el tercer trimestre del año. La Encuesta de Población Activa (EPA) ha puesto de relieve la subida de tres puntos de la tasa de paro con respecto al anterior trimestre, lo que supone que 135.800 almerienses se encuentran sin empleo, es decir, 3900 más que las cifras aportadas en último informe del Instituto Nacional de Estadística.

La tasa de paro, que ya alcanza al 38,77 por ciento de la población activa almeriense, es un dato insufrible para nuestra economía y para miles de familias, ya que en la práctica supone que 4 de cada 10 almerienses en condiciones de trabajar se encuentran sin empleo. Un auténtico drama difícil de encajar, al que debemos de prestar toda nuestra atención y todo nuestro esfuerzo, y en el que la iniciativa política es fundamental.

Sin embargo, el Gobierno de Mariano Rajoy parece no tener nada que decir ni que hacer para reducir estas tasas tan altas de paro en Andalucía y, especialmente, en la provincia de Almería. 

Se niega a echar una mano y más parece interesado en seguir cercenando nuestras posibilidades de crecimiento que en “invertir” en las personas sin trabajo que tan mal lo están pasando en esta tierra.

 Es difícil de entender que el Ejecutivo del Partido Popular siga mirando para otro lado y rechazando que nuestra región, al igual que Canarias o Extremadura, se pueda beneficiar de un plan de empleo extraordinario y que, además, abunde en ese drama recortando en más de un 50% la financiación para Andalucía de las políticas activas de empleo. Resulta incomprensible.

Mariano Rajoy, que llegó a la Moncloa prometiendo que su primer objetivo era luchar contra el paro ha hecho, en realidad, todo lo contrario.

 La EPA de finales del año de 2011, la última con un gobierno socialista, situaba la tasa de paro en el 33,31 por ciento en la provincia de Almería con 120.500 parados; es decir, 15.500 desempleados menos de los que tenemos en la actualidad. Ante la evidencia de ests cifras, ¿estamos, por lo tanto, mejor o peor que entonces? En la misma pregunta está la respuesta.

En medio de este desastre sin precedentes para la provincia, el Partido Popular intenta colar el mensaje de que la recesión ha acabado y que comienza la recuperación. 

Pero, ¿para quién? ¿para los parados, para todas las miles de personas que no reciben ninguna prestación; para los pensionistas a los que no se les revaloriza las pensiones y ahora pagan también las medicinas; para los enfermos, para los dependientes, para los estudiantes que han perdido su beca?...  

¿Dónde está la recuperación?