Si el PSOE pretende convertir a una persona como doña Susana Díaz en su mejor referente respecto de la realidad política y social española, lo mejor que podría hacer es cambiar de percepción o cambiar de personaje. Y es que no se puede hacer mayor demostración de desconexión con la realidad política y social de Andalucía y España que los presupuestos que acaba de presentar la presidenta de la Junta para el próximo año.
Previsiones Y como en la elaboración de unas previsiones económicas no cabe la precipitación o la improvisación, sólo podemos deducir que la bofetada al sentido común y a la situación cotidiana de miles de familias andaluzas que suponen estas cuentas cicateras tan ampulosamente presentadas, se propina desde la falta de respeto a la inteligencia de millones de andaluces como usted o como yo. Y es que el Proyecto de Ley del Presupuesto de Andalucía para 2014 está muy alejado de las necesidades reales de los andaluces, que necesitan unos presupuestos que destierren las malas practicas de despilfarro y la corrupción, además de la garantía de control del dinero publico y las políticas de crecimiento y empleo destinados a luchar contra el paro, garantizando las prestaciones sociales para quien más lo necesita. Eso para empezar.
Mala voluntad Y para continuar, la mala voluntad y la admisión de la vergüenza por parte de la Junta de Andalucía se demuestra en que un año más no han tenido coraje de presentar unos presupuestos provincializados. El vergonzante espectáculo que están protagonizando estos días los consejeros y consejeras del gobierno bipartito (PSOE-IU) disimulando datos y camuflando realidades es digno de figurar en la historia del bochorno democrático en Andalucía.
Calle Porque lo cierto es que este Presupuesto seguirá aumentando la brecha de quienes disfrutan de privilegios en Andalucía y los que no, mostrando una vez más la insensibilidad de socialistas y comunistas a los problemas de la gente de la calle, y estar preocupados únicamente de mantener bien engrasada la maquinaria del sostenimiento de los privilegios para compañeros, familiares y amigos, centrando su preocupación en el mantenimiento de la maquinaria de propaganda mediática.Pero por mucha propaganda que se empeñen en lanzar estos días por todos los medios afines, el ejercicio presupuestario de socialistas y comunistas para Andalucía es ficticio, decepcionante y opaco, poniendo en grave riesgo el estado del bienestar, la educación, la sanidad, y los servicios sociales en Andalucía. Andalucía necesita unos presupuestos para salir de la crisis y no cuentas que son cuentos.
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