Cambios en el modelo de negocio para el sector del tomate almeriense

El tomate es el cultivo más importante de la provincia de Almería. Esta afirmación es un hecho contrastable tanto de forma cuantitativa como cualitativa, ya que es un producto que forma parte del imaginario colectivo de la sociedad almeriense. No hay fruta u hortaliza que se produzca de manera tan intensa en la huerta del sur de Europa, ni producto alimentario que genere tantos ingresos. Este hecho provoca que cuando se piensa en la agricultura almeriense, es difícil que nuestra mente no evoque a esta solanácea de color rojizo que se ha convertido en la principal enseña del cultivo bajo invernadero. 

El sector del tomate en Almería ha sido el objeto de estudio de un artículo para entender los cambios que se han producido en el modelo de negocio de este producto. El estudio ha sido llevado a cabo por Jaime De Pablo Valenciano, Miguel A. Giacinti-Battistuzzi, Valentín Tassile y Tomás García Azcárate y analiza los cambios tanto en la estructura de negocio como en las dinámicas exportadoras que tuvieron lugar en el sector entre los años 2009 y 2013. 

Principales conclusiones del estudio: 

1) El tomate es el producto hortofrutícola más consumido en Estados Unidos y la Unión Europea, algo que se debe en gran medida a los nuevos hábitos de consumo, la creciente preocupación por mantener un estilo de vida saludable y al crecimiento de la clase media a nivel mundial.

2) La Unión Europea es el principal mercado mundial para la exportación de tomate: el conjunto de los Veintiocho consume el 57,8% del volumen mundial en kilos y supone el 65,7% del valor global de este producto. 

3) España es el principal proveedor de tomate a la Unión Europea, aportando el 23,78% y 21,7% de las importaciones europeas en toneladas y valor respectivamente. La provincia de Almería representa el 54,78% del valor físico y 51,47% del valor monetario de este sector, lo que le atribuye una importancia estratégica en el consumo mundial de este producto.

4) La tendencia global en el comercio internacional de frutas y hortalizas muestra que la concentración empresarial es decreciente. De acuerdo a esta evidencia, los autores rechazan que la concentración en torno a unas pocas empresas comercializadoras sea la solución a los problemas económicos inherentes al sector. Sin embargo, ofrecen alternativas a este hecho, como las estrategias organizativas horizontales pque ueden favorecer un mayor poder de negociación, la rápida adaptación a los cambios en los mercados y una gestión empresarial estratégica.

5) La especialización en la producción resulta otros de los factores clave para superar los cambios en el modelo de negocio del tomate en Almería, según explican los autores. La estrategia actual de los grandes distribuidores (en el estudio se citan los ejemplos de Carefour o Mercadona, entre otros) consiste en la compra de productos específicos a compañías privadas, por lo que esta tendencia parece ganar peso de cara al futuro. 

6) Los cambios en líneas generales no han sido significativos, si bien las empresas líderes han sido las que han introducido mayores variaciones en cuanto a estrategia de mercado de destino o de precios. A su vez, los autores señalan que el crecimiento en volumen no ha ido acompañado por una subida del valor del producto, sino que este se ha ajustado para ser más competitivos en nuevos mercados. Para finalizar, los autores sugieren una creciente "incertidumbre" acerca del éxito futuro del modelo. Esto se achaca a la competencia cada vez más intensa, fruto de una progresiva liberalización de los mercados globales.

7) Al analizar el periodo de tiempo correspondiente al intervalo entre 2009 y 2013, ciertos fenómenos de gran calado, como el veto ruso o el Brexit, no aparecen reflejados. Sin embargo, las conclusiones y la imagen global que plantea el estudio es motivo más que suficiente para entender la relevancia de las cuestiones planteadas.Puedes acceder al artículo completo en el siguiente enlace.