Cajamar participa en un proyecto para mecanizar la recogida de cítricos

Siete entidades españolas, entre ellas la Fundación Cajamar, participan en el proyecto Citrutec dirigido al desarrollo y adaptación de prototipos, tecnológicamente avanzados, para su empleo en la recolección de cítricos, tanto con destino a fresco como a la industria.

El proyecto, financiado por el Programa Nacional de Desarrollo Rural del Ministerio de Agricultura, además de impulsar la modernización de las explotaciones a través de la mecanización, fomenta el uso de técnicas de cultivo respetuosas con el medio ambiente, incrementando su rentabilidad y la seguridad.

Participantes
Las entidades que participan en el proyecto son, además de Cajamar, Cítricos del Andévalo,  ANECOOP, Universidad de Córdoba, Universidad Politécnica de Cartagena;,Universitat Politècnica de València e  Instituto Valenciano de Investigaciones Agrarias. 

El proyecto busca avanzar en la mecanización de las operaciones de cultivo: incorporación de nuevas tecnologías, recolección mecanizada y poda de adaptación, junto con el fomento de medidas agrosostenibles, sistemas de protección del suelo, valorización de subproductos y uso eficiente de insumos.

La idea es, además, impulsar la formación de agricultores y técnicos o incorporar a jóvenes y mujeres a la producción citrícola, y crear un plan de difusión que mejores la incorporación de innovaciones y la extensión de prácticas de cultivo sostenibles.

El programa Citrustech fue aprobado el 13 de marzo pasado por la Asociación Europea para la Innovación, en el marco del Programa Nacional de Desarrollo Rural 2014-2020. Se presentaban más de 240 proyectos y finalmente Citratos se incluyó en la lista de 47 autorizados.

Objetivos
El proyecto aporta el desarrollo y adaptación de prototipos, tecnológicamente avanzados, para su empleo en la recolección de cítricos, con destino a fresco como a industria y establece los criterios de adaptación y manejo de las plantaciones.

Mas allá de la modernización de las explotaciones, el proyecto incluye  el fomento de técnicas de cultivo respetuosas con el medio ambiente, que aportan una mejora para la sostenibilidad de las explotaciones y formación.

El proyecto supone un doble impacto. Por un lado, el desarrollo e implementación de la mecanización en los cítricos, la cual tiene un efecto directo en los resultados económicos; y por otro, la mitigación del cambio climático, a través de la preservación y mejora de las explotaciones.