Los regantes almerienses quieren las aguas residuales recicladas

La sequía meteorológica sigue su curso y los regantes se muestran preocupados por el futuro inmediato. Se teme que este mismo mes, si las reservas siguen bajando, se suspendan los envíos de agua desde el Negratín o el Tajo-Segura, creando una situación dramática sobre todo en las comarcas del Levante y del Almanzora.

En esa tesitura, la Mesa del Agua y la Federación de Regantes de Almería miran con lupa en busca de recursos para los regadíos, que a lo largo de este mes iniciarán las plantaciones de cara a la próxima campaña. Y lo más cercano no es el agua que podría llegar, sino la que ya está en la provincia.

Regeneración
Son las aguas que abastecen a ciudades y pueblos, aguas que según el presidente de Feral y portavoz de la Mesa “no podemos permitirnos el lujo de que se sigan tirando a los ríos o al mar, mientras el campo sigue seco”.

La idea, que la Mesa trasladaba recientemente a la consejera de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible, Carmen Crespo, es avanzar en los proyectos de estaciones depuradoras previstas para toda la provincia y apostar por la construcción de plantas de tratamiento terciario.

Una idea que comparte “absolutamente” la consejera que, tras el encuentro con la Mesa de Agua afirmaba que se trata de un plan esencial de cara al futuro, dada la “importancia de incorporar las aguas regeneradas para atender a los regadíos”.

Mucha agua
Los regantes almerienses calculan que ese aporte podría suponer poner a disposición de los agricultores más de 50 hectómetros cúbicos adicionales, una cantidad importante que supone prácticamente la misma que aportan los dos trasvases que recibe la provincia en los años en los que no hay recortes; mucho más en los que son reducidos por el descenso de los niveles embalsados.

En el caso del Poniente esas aguas regeneradas ya se están utilizando, aunque están pendientes las obras de los terciarios para las aguas residuales de El Ejido y Roquetas de Mar; sólo estos dos núcleos de población aportarían más de 15 hectómetros cúbicos adicionales a la disponibilidad actual de agua en la comarca, lo que permitiría seguir adelante con el pan de recuperación del Acuífero de Dalías.

Las actuaciones en depuración, primero, y posterior tratamiento terciario tendrían la ventaja de que se distribuyen por toda la provincia, desde Adra hasta Pulpí. En conjunto, utilizar las aguas desechadas por los ciudadanos permitiría un aporte global de cerca de 70 hectómetros cúbicos de agua para riego, sumando la que ya se utiliza en el área de la capital, gestionada por la comunidad de regantes Cuatro Vegas.

Urgencia
Desde la Mesa del Agua se considera urgente el desarrollo de los proyectos que permitan ese aprovechamiento de las aguas residuales depuradas y tratadas y pone como ejemplo el caso de Huércal Overa, donde “hay un hectómetro cúbico  de agua que irá a la rambla y no se podrá utilizar, por eso pedimos que la Junta pueda acometer el terciario en esta y  en todas las plantas de aguas residuales de la provincia”.

El mejor ejemplo lo tienen los regantes en la capital ya que desde hace veinte años las aguas residuales se tratan y son puestas a disposición de los regantes en un volumen que supera los 15 hectómetros cúbicos anuales.