El alto valor de las hortalizas retrasa la plantación de sandía

La campaña de plantación de la sandía ya está en marcha, aunque llega con un retraso de alrededor de dos semanas con respecto a los años anteriores. En la memoria de los productores está el inicio de la campaña pasada, con un mes de abril en el que las cotizaciones de este fruto estuvieron muy por debajo de lo deseable.

Con esa experiencia, que respondía al hecho de que cuando Almería inició la recolección de sandías esa producción se solapaba en los mercados nacionales e internacionales con la procedente de Senegal principalmente, para este año nadie quiere arriesgarse a unos inicios con números rojos que, en las subastas, no llegaban casi ni a cubrir los costes.

Alargar cultivos
La decisión de retrasar un par de semanas el inicio de la campaña de primavera tiene también una argumentación económica ya que los precios del resto de las hortalizas se han mantenido en este pasado mes de enero en niveles sensiblemente mejores que el año pasado.

Esos precios y la rentabilidad que presentan para los agricultores, han llevado a muchos de ellos a alargar los ciclos de buena parte de los cultivos para intentar aprovechar para obtener una mayor rentabilidad, convertida en uno de los ‘talones de Aquiles’ del campo almerienses durante los últimos ejercicios.

Organizaciones agrarias como Coag y Asaja reconocen que ese retraso se debe a los precios ‘ruinosos’ de las sandías en los primeros compases de la anterior campaña, algo que este año tratan de evitar los productores saliendo al mercado unas semanas más tarde, cuando el producto que llega desde África esté en su última fase de producción y de comercialización.

En el caso del melón, tradicionalmente se inicia el cultivo en el mes de febrero, aunque se estima que este año se retrasará al alargar muchos productores de calabacín, berenjena o pepino sus producciones si se mantienen los precios como hasta ahora.

Lo que aún resulta difícil de prever es la superficie dedicada a los cultivos de estas dos frutas, cuyo consumo se relaciona con el buen tiempo. En sandía se calcula que la superficie volverá a estar por encima de las 10.000 hectáreas, próxima a las 10.671 del pasado año que la llevó a desbancar de la segunda posición en Almería a la superficie del tomate.