Aulas, oficina de turismo y salón para el Mesón

El interior del edificio del Mesón Gitano ya tiene proyecto.  Tendrá sitio para compaginar su aspecto turístico, el patrimonial y para el que fue concebido, la realización de cursos de formación para favorecer el fomento del empleo.

Así, la planta baja contará con dos entradas. Una de ellas dará entrada a un gran espacio que se dedicará a aulas de formación que se puede dividir en dos clases de 70 metros cuadrados cada una de ellas. La otra entrada dará acceso a la oficina de turismo que cuenta con un espacio de 100 metros cuadrados.

En la planta alta se dejará una gran sala diáfana para uso polivalente pero que tiene un objetivo, el acoger una posible exposición de los restos arqueológicos encontrados en el desarrollo de la obra y que actualmente custodia la Junta de Andalucía en el Museo de Almería. Si bien para esto sería necesario llegar a un acuerdo entre la administración autonómica y la municipal para cuya firma aún no se han iniciado los contactos.

Restos
Todo esto estará presidido por la puesta en valor de los restos de la trama urbana medieval encontrada en la falda de La Alcazaba y a la que se permitirá contemplar a través de zonas acristaladas y balconadas.

Cabe recordar que el edificio cuenta con un ascensor que conecta directamente con la gran explanada ubicada en la parte superior del edificio y que es donde se encuentran las cuevas.

El proyecto fue explicado en el último consejo de administración de la empresa municipal Almería Urban así como el visto bueno a los cambios en los muros que se habían aprobado por parte de la Comisión Provincial de Patrimonio de la Junta.

Pero sin duda entre los puntos más importantes de esa reunión se encuentra el análisis realizado a las mejoras propuestas por la empresa adjudicataria de las obras del Mesón Gitano y que tanto la Delegación de Medio Ambiente como la de Cultura consideran inicialmente como viables.

De ellas el consejo dio luz verde a que la empresa inicie dos que no son controvertidas. La primera es la mejora de las callejuelas que unen las calles Fernández y Encuentro y que permitirán un importante cambio en los accesos.

Y la segunda se corresponde con la conexión entre la Avenida del Mar y la calle Fernández que mejoraría mucho el acceso a este espacio desde el barrio de Pescadería y ayudaría a la movilidad.

Para el resto de las mejoras ante la necesidad de realizar estudios arqueológicos se va solicitar a la Junta de Andalucía la ayuda de un arqueólogo. Esas mejoras que de momento quedan pendientes se corresponden con el ajardinamiento de la ladera, así como la conexión con La Hoya y  la realización de un espacio de aparcamiento.

Ahora que se ha lanzado el guante queda saber la reacción que tiene la administración autonómica.