Subdelegación firma la devolución de más de 3.100 inmigrantes

Desde que comenzó el año, la Subdelegación de Gobierno ha firmado 347 órdenes de expulsión de inmigrantes en situación irregular en nuestro país y ha dictado 3.105 devoluciones. Las cifras son del martes pasado y, a ellas, habrá que sumar ahora los expedientes que se han tramitado a lo largo de los últimos días en los que han seguido llegando pateras. El miércoles, por ejemplo, fueron trasladados al Puerto de Almería 57 inmigrantes de origen subsahariano -entre ellos había dos bebés- y ayer fueron auxiliadas otras treinta personas, además de tres polizones en el Puerto de Almería. 

Sin embargo, una cosa son los expedientes de expulsión y devolución que se firman y otra, aquellos que, finalmente, se llevan a cabo. Las expulsiones están previstas en la ley como alternativa a otras sanciones en caso de que el extranjero haya cometido determinadas infracciones, entre las que destaca la estancia irregular en España, y requieren un expediente administrativo previo. 

La estancia irregular, sin embargo, no siempre se sanciona con la expulsión, ya que el sistema jurídico español se basa en el principio de proporcionalidad y,en determinados supuestos, la sanción se solventa con una multa sin que conlleve la expulsión del territorio. Cuando a un inmigrante irregular se le notifica el inicio del expediente de expulsión caben dos posibilidades: o que quede en libertad o que la Policía y un juez autoricen su ingreso en un centro de internamiento, en el que puede permanecer hasta un máximo de 40 días.  

La diferencia con las devoluciones es que estas no necesitan de expediente administrativo; están contempladas en la Ley de Extranjería para quienes “habiendo sido expulsados contravengan la prohibición de entrada en España” y para “los que pretendan entrar ilegalmente en el país” (artículo 58.3 de la Ley de Extranjería). En ambos casos, en Almería el porcentaje de expulsiones y devoluciones materializado se sitúa en torno al 12%. 

Desde 2011
Según datos facilitados por el Ejecutivo, en los últimos seis años, un total de 83.375 personas han sido deportadas de nuestro país. Las cifras reflejan una tendencia a la disminución de devoluciones y expulsiones en los últimos años, así como que son sobre todo marroquíes los expulsados. Algunos expertos relacionan el descenso de las expulsiones con la mejora de la situación económica, especialmente las deportaciones administrativas a Marruecos.

Marroquíes y argelinos
Los marroquíes son, con gran diferencia, los extranjeros que sufren más deportaciones. De las 4.190 personas que fueron devueltas en 2016, 3.180 eran marroquíes, un 75,8%, y 713 procedían de Argelia, un 17%. En cuanto a los métodos de entrada al país, los argelinos intentaron mayoritariamente entrar en pateras, mientras que los marroquíes optaron por pateras y otros medios.