El segundo grupo de legionarios se une a la misión internacional en Irak

La Brigada de la Legión organizó la primera edición de La Desértica con el compromiso y la dedicación de meses de trabajo. Ahora bien, el corazón de los legionarios está siempre en el campo de batalla. Por eso, el general jefe Juan Jesús Martín Cabrero exprimió los minutos de su agenda para despedir personalmente a más de un centenar de soldados destinados a la misión Apoyo Irak.

El grupo compone la segunda de las tres rotaciones previstas en el contingente y salió del Aeropuerto de Almería poco después de las nueve de la mañana con destino Bagdad. “Vuestra misión es la de colaborar en el adiestramiento de las Fuerzas Armadas iraquíes, pero no podéis olvidar que vuestra seguridad y la de vuestros compañeros es nuestra principal preocupación en zona de operaciones y también debe ser la vuestra, permaneced alerta y abrid bien los ojos”, dijo el general a pie de pista.

“Como os dije en el acto de despedida en la Base, vosotros sois los privilegiados que habéis sido seleccionados entre otros muchos voluntarios. Tenéis la obligación de mantener o superar el nivel alcanzado por tantos contingentes de legionarios que os precedieron”, añadió el jefe de la Brigada Rey Alfonso XIII.

Los legionarios tienen como principal objetivo la formación de las tropas locales, dentro de una misión internacional auspiciada por la OTAN y conocido como Inherent Resolve. Su principal centro de operaciones será la base Gran Capitán de la localidad de Besmayah, ubicada al suerte de Bagdad, en una zona de desierto lejos del frente sirio-irakí.

“Una vez más, los legionarios tendremos que demostrar nuestra capacidad para cumplir con las misiones asignadas y ser dignos de la confianza que el Mando ha depositado en nosotros”, indicó el general de brigada Martín Cabrero. “Vuestro nivel de preparación es muy alto, sé que cumpliréis fielmente con el Credo legionario y con la ayuda de nuestro protector, el Cristo de la Buena Muerte, estoy seguro que desarrollareis con éxito esta tarea, para mayor prestigio de la Legión, de nuestras Fuerzas Armadas y de España en el mundo”, añadió.

La primera rotación partió hacia Irak el pasado día 8 de noviembre. El contingente español estará compuesto por algo más de 500 soldados. La Legión es la ‘unidad madre’ del despliegue, aunque también participan militares de otros puntos del país (por ejemplo, miembros de  Unidades Especiales de Alicante).

El contexto
Los legionarios no tienen encomendadas tareas de enfrentamiento directo con yihadistas de Daesh y Al Qaeda. Además, la situación en la zona ha mejorado sustancialmente con el avance de las fuerzas irakíes y kurdas al norte y al oeste del país.

En los últimos meses han caído consecutivamente los bastiones de Estado Islámico en Mosul (a 70 kilómetros de Erbil, capital del Kurdistán), Raqqa (capital del Califato de Daesh) y Deir Ezzor (ciudad de Siria).

La próxima rotación de la Legión, la última prevista para el despliegue, saldrá el próximo 29 de noviembre, aunque todavía no hay confirmación del horario para la marcha desde Almería. La misión tiene una duración de seis meses.