Reparto de roscos del ‘nuevo’ San Sebastián en su templo parroquial

Este 2018, la festividad de San Sebastián ha comenzado en la parroquia a la que da nombre el día anterior a su onomástica, que fue el pasado sábado día 20. Tras la festividad del pasado año, la imagen del santo fue enviada a restaurar por Joaquín Gilabert, autor de las restauraciones de la Virgen del Saliente de Albox o del Cristo del Bosque de Bacares, entre otros.

La imagen la esculpió Perceval en los años 40 y estaba en muy mal estado. El restaurador culpó en buena medida a una restauración llevada a cabo hace 30 años, que se hizo inyectado yeso en grietas y orificios y repintándola. Fue peor el remedio que la enfermedad

Tras la misa del viernes, Gilabert proyectó varias dipositivas y explicó a partir de ellas el complejo proceso que ha llevado a cabo durante nueve meses. Unos 220. 000 euros costó la restauración.
Y la imagen del santo quedó expuesta en el Altar Mayor para la Misa Mayor y tradicional reparto de roscos del día de su onomástica.

Misa y reparto de roscos El sábado 20 fue el día grande. La iglesia parroquial de San Sebastián presentaba el tradicional lleno, que nos recordaba aquellas misas de los años sesenta en las que los fieles ocupaban incluso el islote central existente por entonces ante el templo. Concelebraron la Eucaristía Juan Cruz, párroco de Santa María de Belén, con Manuel Cuadrado, Francisco Pérez y José María Sánchez así como varios monaguillos.
Preparados había 1.200 roscos de San Sebastián e igual número de estampas de la imagen del santo restaurada, ubicada en el Altar Mayor.

En la prediucación, el sacerdote oferente, Juan Cruz, habló de la dimensión exterior (biografía) e interior (llamada de Dios) de la persona. Suficientemente conocida es la primera de ellas de San Sebastián. La segunda fue la que le llevó a vivir intensamente el cristianismo, renunciando a su vida de confort al lado de Diocleciano para aceptar el martirio por no renegar de su fe. “Fue un grano de trigo que feneció para producir fruto”, aseguró.

Tras la misa, se llevó a cabo la bendición del millar largo de roscos y reparto entre los fieles que cada año se dan cita en el templo de San Sebastián el día 20 de Enero. También se dieron estampas con la imagen restaurada.