En los próximos días se espera que los contenedores ubicados en la calle Poeta Durbán sean trasladados a las calles Gibraltar Español y Cartagena. Hace un año que los vecinos de esta dirección de El Zapillo transmitieron por primera vez sus quejas al Ayuntamiento de Almería ante los fuertes olores y la falta de limpieza en las zonas donde se encuentran los contenedores de recogida de basura. “Los malos olores son insoportables y aquí nadie hace nada”. De esta manera, Carmen Expósito Pardo expresaba su malestar por la ubicación de cinco contenedores a escasos metros de su casa, sita en el número 8.
Otra de las vecinas afectadas, Micaela Conesa Lara, reconoce que siempre ha habido contenedores en la calle, pero no tantos. La instalación de tres depósitos más tras eliminar los de la calle Quesada por la construcción del carril bici se produjo hace dos años. “Pedimos que los puntos de basura se repartan en varias calles. No es lo mismo tener dos que cinco. Ahora todos los ciudadanos de la calle Quesada y sus correspondientes bares vienen aquí a tirar sus desperdicios”, subraya Conesa Lara.
Falta de civismo
El hecho de que los ciudadanos tiren la basura e incluso mobiliario fuera del horario permitido agrava aún más el problema. “Los deshechos se acumulan desde por la mañana y el mal olor aumenta. Hay quienes ya ni siquiera meten las bolsas en los contenedores y las dejan en la acera. Las tiran desde lejos, ni se acercan”, lamenta Expósito.
Siguiendo el procedimiento legal, en septiembre de 2017 los vecinos expusieron una queja por escrito a través de la oficina de la ciudadanía. Este verano solicitaron una entrevista en persona con el concejal de Servicios Municipales y Playas, Juan José Alonso, y el responsable de limpieza. “Aunque las críticas han sido atendidas y nos han prometido una solución, todavía no hemos recibido noticias. Luego quieren que haya turismo”, reprochaba Expósito. En este sentido se pronunciaba el PSOE a finales de julio. El concejal José Antonio Alfonso tachaba de “inaceptable” que el Ayuntamiento mantuviera El Zapillo “en la suciedad absoluta” cuando este barrio tendría que ser “un escaparate de la ciudad”.
Pero el Consistorio ya estaba barajando opciones para dar respuesta a los vecinos de la calle Poeta Durbán. Cualquier proceso administrativo requiere unos trámites que se han realizado estas últimas semanas. Ahora se están ultimando los informes de la policía local y del servicio de limpieza para reubicar los contenedores: “Hay que estudiar dónde colocarlos y cómo hacerlo”, justifica Alonso.
El Ayuntamiento explica los cambios
Desde que recibieron la primera petición, las autoridades han estado trabajando para darle una solución a estos vecinos. Ante la propuesta de dejar dos contenedores en la calle Poeta Durbán y trasladar el resto a una calle colindante, el Ayuntamiento señala que esto no es posible porque una vez que esos dos estén completos, la gente seguirá acudiendo a este punto de recogida de basura y tirarán sus residuos al suelo, por lo que el problema sería aún mayor.
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