Aviones de Salvamento Marítimo, sin radar desde agosto

Los tres aviones de la flota de Sociedad de Salvamento y Seguridad Marítima (Sasemar), claves para las operaciones de rescate en alta mar, trabajan sin sus radares telephonics desde el año pasado.

El Gobierno reconoce las carencias en una respuesta parlamentaria al diputado nacional Carles Campuzano (PDeCat). “Debido a cuestiones de titularidad para el otorgamiento de las correspondientes licencias, que se están tramitando con urgencia por todas las partes y cuya solución se espera en breve, los tres aviones de Salvamento Marítimo no tienen operativo el radar telephonics aps-143c ocean eye”, señala el Ejecutivo.

Según el documento, los aviones sufrieron averías de estos recursos tecnológicos el 9 de febrero, el 3 de junio y el 1 de agosto de 2018. Desde entonces carecen de este tipo de radares.

El Gobierno asegura que trabaja en una solución rápida y subraya que los aviones disponen de otros elementos para cubrir las labores de rastreo y auxilio.
“La falta de operatividad se suple con otros equipos de los que disponen los aviones como cámaras electro-ópticas y el radar slar, que permiten la asistencia a las embarcaciones localizadas por el Frontex (Agencia Europea de Guarda de Fronteras y Costas de la UE)”, explica.

El doble de pateras
En este sentido, el Ejecutivo recuerda que Salvamento Marítimo dispone también de una flota de once helicópteros repartidos por las bases costeras españoles para ofrecer apoyo aéreo a las embarcaciones de auxilio.

El diputado del Grupo Mixto interrogó al Gobierno sobre las consecuencias de la falta de radares en las operaciones de rescate. “¿Considera que la identificación visual, que alcanza una distancia aproximada de dos millas, es suficiente para sustituir el rastreo que puede hacer un radar de búsqueda específico, que alcanza una distancia de 20 millas, para rescatar pateras”, preguntó.

Ahora bien, la falta de radares no solo afecta a la localización de pateras sino también a operaciones sobre pesqueros, mercantes y embarcaciones de recreo.

La llegada de inmigrantes irregulares en pateras a las costas españolas se ha duplicado en el año 2019, según datos publicados por el Ministerio del Interior (entre el 1 de enero y  el 17 de marzo). En total se han registrado 5.491 personas en embarcaciones clandestinas, un 94 por ciento de incremento en la comparación interanual. Este año han llegado ya 160 pateras. Por el contrario, los cruces ilegales de las fronteras de las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla han bajado un 50 por ciento en el mismo periodo.