Liquidan 2018 con plan financiero y acusaciones de “electoralismo”

El Ayuntamiento de Almería daba ayer cuenta de la liquidación del presupuesto municipal de 2018 y aprobaba el Plan Económico-Financiero necesario después de que se haya incumplido la regla de gasto al gastarse 12,5 millones de euros más de lo permitido. Algo que ocurría principalmente tras la incorporación de 15 millones de euros de remanentes y que obligaban a aprobar el plan aunque solamente recogiera la aprobación del presupuesto de 2019, ya en vigor.

Pero más allá de las cifras, la lucha dialéctica en el salón de plenos se centró en la gestión realizada por parte de los populares y el “electoralismo” de “haber retrasado obras” para el año antes de las municipales.

Defendía la liquidación la concejal no adscrita, Mabel Hernández, quien reconocía “algún incumplimiento” pero le daba su visto bueno también al plan económico-financiero.

Más duro fue el discurso de Rafael Esteban, portavoz de Izquierda Unida, quien aseguró que había subido “la presión fiscal hasta los 603,14 euros por habitante” y que el equipo de Gobierno ha llevado “todas las inversiones y obras a finales de 2018 y 2019” como “una artimaña en año electoral” pero asegura que “el alcalde no ha cumplido con lo que ponía en la memoria de sus presupuestos” poniendo como ejemplo Artes de Arcos o el Museo de la Vega.

Insistió además en que desde el equipo de Gobierno “saben que hay barrios que están dejados de la mano de dios” y que “los grandes problemas de la ciudad no se han solucionado” afirmando que “hay barrios que están totalmente fuera de control”. Eso sí, apoyó el plan financiero.

Por su parte Miguel Cazorla, portavoz de Ciudadanos, criticó la gestión municipal y que se haya roto la regla de gasto por haber acumulado superávit.

¿Dónde está?
Volvió a achacar a este tipo de gestión el que su grupo municipal no apoyara el presupuesto, además de preguntar por todos los proyectos en el tintero que firmaron en sus acuerdos.

Llegado el momento de hablar del plan financiero, Cazorla aprovechó para ‘salvar’ a María Vázquez, concejal de Economía, de la situación “en la que la ponen sus compañeros” y asegurar que los vecinos de la calle Santiago le tocan a la puerta para criticar unas obras “innecesarias” y con las que “en vez de ganar votos, los van a perder”.

Para Adriana Valverde, portavoz socialista, esta liquidación muestra “el fracaso de la gestión” de los populares ya que, incluso el año en el que se saltan la regla de gasto, solamente son capaces de ejecutar el 35,4% de las inversiones previstas.
En cuanto al plan financiero, lo apoyaron “por responsabilidad” ya que la ley obliga a realizarlo.

Coherencia
Centró la defensa de la liquidación María Vázquez, en la “falta de coherencia” de la oposición que cuando gastan critican, y cuando no, también. Defendió la “excelente salud” de las financias municipales y que el motivo del plan financiero “viene por el desbloqueo de grandes temas como el soterramiento, con 5 millones de euros; la Plaza Vieja, con 1,7 millones; o el paseo marítimo con 1 millón” que se han ejecutado a lo largo de 2018.

Le recordó a Cazorla que las obras de Santiago “estaban en el presupuesto de 2018” que el apoyó, y afirmó: “usted prefirió una Faluca y nosotros la realización de obras en una calle”.