“Tengo una cosa muy guapa, de esas que te gustan a ti. Una moto que flipas”, anuncia F. M. con aire de revelación.
“¿Qué moto?”, responde J. A. intrigado.
“Me ha dicho que es una parabellum de esas”.
“¿Pero de las antiguas, no?”
“Noooo! Moderno, color oro, con las cachas (...) Si no me equivoco, creo que quiere 3.500 hermano”, detalla F. M.
“Entonces no será tan buena”, concluye decepcionado J. A.
La conversión fue grabada por agentes de la Policía Judicial de la Guardia Civil el 6 de septiembre en el marco de la Operación Teflón y muestra el interés de J. A. por hacerse con una pistola de cachas doradas, de esas que aparecen en el cine y construyen el universo del crimen organizado.
J. A. de 33 años de edad y nacionalidad española es descrito por la investigación como “el mayor traficante de marihuana en el Poniente”. Actualmente se encuentra en prisión provisional en El Acebuche acusado de controlar decenas de pisos dedicados al cultivo de marihuana, con epicentro en la barriada de Las 200 Viviendas de Roquetas de Mar.
El sumario de la Operación Teflón presenta conversaciones con un agente de la Policía Local de Vícar también detenido y, más aún, una vida marcada por el lujo y el poder más allá de la compra de una pistola. Un jefe. Un empresario sin empresa. Un mediador en una selva de plantas de cannabis.
Un informe elaborado por la Compañía de la Guardia Civil de El Ejido, fechado el 28 de junio y aportado al Juzgado de Instrucción número Cinco de Roquetas de Mar, destaca que J. A. “nunca ha tenido actividad laboral alguna” y, sin embargo, “lleva una vida lujosa” costeada presuntamente con un “cultivo intensivo de marihuana, mediante la instalación interior en viviendas de verdaderas plantaciones”.
Los investigadores trazaron un perfil del presunto traficante. Una simple mirada a su cuenta en Facebook afloró su alto nivel de vida, reflejado en su pasión por los coches. Estacionado en la cochera de su vivienda tenía un Lamborghini Murciélago de 392.000 euros, mientras otras imágenes captadas por la Guardia Civil le situaban al volante de un Lamborghini Gallardo de 220.000 euros.
“Denota que posee un nivel económico alto, al contrario de lo que nos indican los datos proporcionados por la Seguridad Social”, revela el documento al que ha tenido acceso LA VOZ DE ALMERÍA. “No se le conoce actividad laboral remunerada alguna y por las informaciones recibidas serían bienes obtenidos con dinero procedente de la actividad delictiva desarrollada, consistente en el tráfico de drogas”.
Gallos y coches
El rastreo de la Operación Teflón descubrió también dos motos de agua en la vivienda de J. A. o unas zapatillas de marca valoradas en más de 400 euros. La investigación adjudica al detenido el uso o propiedad de ocho vehículos de alta gama valorados en 670.000 euros, así como un caballo de pura raza española con una tasación de entre 20.000 y 30.000 euros.
También se vincula a J. A. con peleas de gallos, una afición que presuntamente compartía con amigos, y que le costó aparecer investigado en la Operación Galldin del Seprona de la Guardia Civil en el año 2016 y en una operación de la Policía Nacional en Murcia con 200 detenidos a principios de 2019, según refleja el sumario.
Según la investigación, J. A. habría presuntamente armado este pequeño imperio gracias al cultivo y la distribución de marihuana en el Poniente. Una conversación de redes sociales en noviembre de 2018, captada por la Benemérita, los investigados adjuntan enlaces de operaciones contra el cultivo de cannabis sátiva en Roquetas de Mar e, incluso, bromas sobre la cosecha de maría y sus beneficios. “Enhorabuena por tu nuevo coche, vecino. Esto ha cortado ya”.
La investigación cree que J. A. manejaba el cultivo a gran escala gracias a una presunta red de viviendas que eran propiedad de un empresario radicado en Vícar y que se alquilaban gracias, siempre según la Guardia Civil, a través de dos agentes de la Policía Local de esa localidad.
La Operación Teflón, adelantada por LA VOZ DE ALMERÍA a principios del mes de octubre, indaga sobre una cartera de 190 inmuebles fundamentalmente en Roquetas de Mar y Berja. Hubo 19 detenidos o investigados, entre ellos los dos policías locales de Vícar y el presunto capo de la marihuana en el Poniente.
“Me costó la noche casi 200.000 euros”
La investigación de la Guardia Civil otorga a J. A. un papel de presunto gran productor de marihuana y, más aún, referencia en la comarca para otros traficantes. En las escuchas se refleja su influencia como mediador entre ajustes de cuentas, robos de droga y diversos episodios de violencia. Acuden a él para hallar soluciones. El 16 de septiembre, una conversación telefónica captada por la Policía Judicial presenta a un desconocido que llama a J. A. para pedirle ayuda con unos traficantes radicados en La Chana (Granada), uno de los puntos más importantes del país en la producción de marihuana en la actualidad. Otra llamada menciona a un conocido clan familiar radicado en la provincia de Almería e investigado por tráfico de drogas y delitos de sangre. Igualmente, las escuchas sacan a la luz un robo por valor de 200.000 euros donde la ‘víctima’ apela al poder de J. A. en Almería.
“Anoche tuve ahí un problema en tu barrio. Unos morillos (...) me han dicho que es socio tuyo o algo de eso, hermano. Me costó la noche casi 200.000 euros, loco, iba a comprar choco choco”, le cuenta J. a J. A.
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