La restricción de aforo del acto institucional en memoria de Los Coloraos y la eliminación del paseíllo y la ofrenda floral pública en el monumento de la Plaza Vieja empañaron ayer el 196 aniversario del fusilamiento de este grupo de hombres que murió en defensa de la libertad.
La Plataforma para el Bicentenario de Los Coloraos y otros cuatros colectivos -la Asociación Amigos de la Alcazaba, La Chanca-Pescadería a Mucha Honra, Acción por Almería y la Asociación de Vecinos del Casco Histórico-, quisieron llevar a cabo su propia ofrenda en una concentración que reunió a unas 200 personas y que cobró más simbolismo si cabe ante la posibilidad de que sea la última vez que se rinda homenaje a Los Coloraos en esta ubicación.
Durante la movilización, la presidenta de Amigos de la Alcazaba, Maite Pérez, tomó la palabra para denunciar que “en lugar de exaltar la memoria de Los Coloraos, el Ayuntamiento ha pretendido enterrarla al reducir el homenaje casi a la nada, suprimiendo la presencia ciudadana este año, que es posiblemente el último que podemos celebrar este acto aquí, en esta plaza, corazón del centro histórico, al pie de nuestro Ayuntamiento”.
Pérez consideró que el Consistorio “ha cerrado los ojos y los oídos a todas las opiniones en contra de sus proyectos, denegando las 117 alegaciones de asociaciones ciudadanas, patrimonialistas, vecinales, ecologistas, de colegios profesionales de arquitectos e ingenieros técnicos agrícolas y de 130 particulares y despreciando las 27.000 firmas” en contra de su proyecto de remodelación de la Plaza Vieja.
Por su parte, la presidenta de la Plataforma para el Bicentenario, Carmen Ravassa, criticó al Ayuntamiento por celebrar el homenaje “a puerta cerrada”. Previamente, encabezó junto al arquitecto Gerardo Roger una ofrenda en la puerta del Cementerio de Almería, donde descansan los restos de este grupo de liberales.
Oposición
La portavoz del Grupo Municipal Socialista, Adriana Valverde, acusó al alcalde de “refugiarse en la Covid para mostrar su desprecio hacia el monumento y hacia un acto en el que los ciudadanos deben estar presentes”. “Hay que cumplir con los protocolos de la pandemia, pero la plaza está acondicionada como demuestran los actos culturales que el Ayuntamiento ha venido realizando estos días; se ha deslucido totalmente el acto de homenaje a estos símbolos de la democracia”, sostuvo.
Por último, el alcalde de la capital, Ramón Fernández-Pacheco, subrayó que el homenaje a los Mártires de la Libertad es “el único acto de la Feria que el Ayuntamiento ha organizado estos días debido a la situación que vivimos” y defendió que la cancelación del paseíllo en la calle responde a su empeño por guardar todas las medidas de seguridad.
“Entiendo que si nos honramos en ser herederos de la ideología de Los Coloraos, el respeto por el que piensa diferente tiene que ser una máxima; el mejor homenaje que les podemos hacer es no ser intransigentes frente al que piensa diferente”, apuntó.
Antes de la conferencia pronunciada por la oradora María Dolores Durán, el primer edil leyó un extracto de la Constitución de 1812 que propugna que ese texto constitucional no puede ser patrimonio de ninguna familia. “Nos tenemos que marcar como reto que esta historia nos una y no nos divida, no permitamos que nadie utilice este capítulo para enfrentar a almerienses contra almerienses porque es el peor favor que podríamos hacer a su memoria; la historia de Los Coloraos es de todos aunque algunos quieran atribuírsela”.
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